La mayoría de las bolsas asiáticas se han adentrado en el verde en este inicio de noviembre, después de la elevada volatilidad que ha dejado el mes de octubre, cuando los parqués regionales se han dejado arrastrar por una montaña rusa en los mercados mundiales.
El Nikkei pone el contrapunto con una caída del 1.06%, en medio de la cautela por las políticas arancelarias de EEUU y las elecciones legislativas de medio mandato. Las bolsas asiáticas, entretanto, han prolongado las ganancias del miércoles y Shanghai avanza un 0,13%, mientras Shenzhen lo hace un 1,01%. El Hang Seng de Hong Kong avanza un 1,45%.
En el rojo, también han acabado el Kospi surcoreano, con un declive del 0,26%, y las bolsas de Tailandia y Malasia, que ceden un 0,20% y un 0,40%, respectivamente. Singapur cube un 1,13% y las bolsas del Pacífico, Australia y Nueva Zelanda suben un 0,18% y un 1,05%, respectivamente.