- Por el contrario, sí que cree que podía producirse en el caso de su testaferro, Alberto Portuondo
¿Recibe Rodrigo Rato un trato de favor? Esa es la pregunta que deben hacerse muchos al ver que el expresidente de Bankia no está en la cárcel mientras que su presunto testaferro, Alberto Portuondo, sí. No obstante, hay una explicación: la Audiencia de Madrid no teme una posible fuga del que fuese vicepresidente del Gobierno con Aznar, pero sí de Portuondo.
El presunto testaferro debe seguir en la cárcel ante la gravedad de los delitos que se le imputan y dado que existe riesgo de fuga
Concretamente, Portuondo se encuentra en situación de prisión incondicional mientras que a Rato sólo se le ha retirado el pasaporte y se le ha obligado a acudir al Juzgado una vez al mes para firmar.
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Según se hace eco El Español, el presunto testaferro debe seguir en la cárcel ante la gravedad de los delitos que se le imputan y dado que existe riesgo de fuga. El juez, en su caso, considera que retirarle el pasaporte no es suficiente para evitar esa posibilidad, y además apunta a la posible destrucción de documentos.
Cree que ante el supuesto entramado que había montado Portuondo pueden existir documentos no incautados que podrían ser destruidos, y también teme que la cantidad de dinero embolsado por su participación en la adjudicación de contratos de Bankia, dos millones de euros, hace que sea necesario tenerle controlado en prisión.
Unos argumentos que bien podrían ser aplicados al caso de Rodrigo Rato, aunque no lo han sido y éste sigue en libertad. La Audiencia Provincial de Madrid ha confirmado la decisión del juez de instrucción de que el testaferro tiene que permanecer en la cárcel, aunque es más que probable que su defensa vuelva a solicitar su puesta en libertad alegando, precisamente, que Rato, principal imputado de la causa, sigue en libertad.
LA DETENCIÓN DE PORTUONDO
Portuondo fue detenido el pasado mes de agosto en el aeropuerto de Barajas cuando pretendía volver a México, lugar donde trabajaba, tras pasar unos días en España de vacaciones. Al ser arrestado perdió su trabajo, y ese fue el motivo que ha esgrimido para tratar de convencer a los jueces de que la prisión provisional no es necesaria -argumentando que ya no tiene motivos para desplazarse allí-.
No obstante, no ha conseguido convencer al tribunal y sigue en prisión. Entre otras cosas porque el juez considera que en su caso el "riesgo" de fuga está justificado y porque todavía no se ha aclarado con exactitud el destino de las "importantes cantidades de dinero" embolsadas sin justificar por el administrador de Albisa, sociedad que medió para pagar comisiones ilegales a Rato por parte de dos empresas de publicidad adjudicatarias de campañas de Bankia.
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