El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha lamentado en el Parlament los incidentes del lunes en la conmemoración del primer aniversario del 1-O, porque "el camino de la independencia no es este".
Lo ha dicho este martes en la intervención inicial del Debate de Política General, donde ha defendido que fueron unos "hechos aislados que no son nada representativos" del movimiento soberanista, y ha pedido que todas las movilizaciones sean radicalmente no violentas.
"El primero de octubre lo hicimos a cara descubierta porque no tenemos nada que esconder. Tenemos que exigirnos que la movilización sea siempre no violenta. Radicalmente no violenta", y ha prometido que el Govern hará autocrítica sobre qué podría haber hecho mejor.
MANTENER LA MOVILIZACIÓN
Pese a ello, ha insistido en no rebajar la movilización ciudadana y ha apelado a la "inteligencia" política del resto de fuerzas, a las que también ha pedido hacer autocrítica, aunque insistiendo en que los primeros deben ser los representantes del Govern.
Ha subrayado que en las próximas movilizaciones "no deben repetirse" los hechos que tuvieron lugar al final de la manifestación convocada el lunes por la 'Plataforma 1 d'octubre' en Barcelona, cuando un grupo de manifestantes rompió por la noche el cordón policial de los Mossos frente al Parlament, haciendo retroceder a los agentes, que terminaron realizando cargas.
En la jornada del lunes, durante la mañana, antes de los disturbios, Torra se dirigió a un Comité de la Defensa de la República (CDR) que reclamaba la implementación de la república, respondiendo que hacían bien presionando para ello: "Apretad, hacéis bien en apretar".
Tras los hechos a las puertas de Parlament, que ha rechazado, ha insistido de nuevo en la necesidad de la protesta de la gente para hacer avanzar el proceso soberanista afirmando que "no hay que rebajar ni un milímetro la movilización".
MIRADAS "DE REOJO" DEL INDEPENDENTISMO
Ha reivindicado que el éxito que ve en la jornada del 1-O de 2017 responde a la unidad entre las fuerzas políticas, las instituciones y la ciudadanía, por lo que ha pedido volver al "trabajo unitario".
"Que se acabe el mirarse de reojo constante", ha pedido, insistiendo en que la unidad y la no violencia es la clave para conseguir ejercer el derecho a la autodeterminación que se ha comprometido a hacer efectivo.
Para Torra, el 1-O fue posible por una cadena de oportunidades producto de esa unidad y de esa forma de hacer cívica y pacífica: "Si no conseguimos rehacerla ahora, no ganaremos, y yo quiero que ganemos".