El socialdemócrata Olaf Scholz, actual ministro de Finanzas y favorito para ganar las elecciones alemanas de este domingo, 26 de septiembre, ha vuelto a imponerse en el tercer y último debate electoral televisado antes de los comicios. En contraste con el empuje de Scholz, el candidato de la CDU de Angela Merkel, Armin Laschet, cada vez pierde más fuerza.
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Scholz recurrió este domingo el tema de la desigualdad social para arremeter contra su principal oponente, reiterando que como canciller impulsará un salario mínimo de 12 euros por hora, algo a lo que se opone la CDU, informa 'Reuters'.
"Señor Laschet, esa puede ser la diferencia entre usted y yo. No lo hago porque haya una campaña electoral en este momento. Llevo años haciendo esta reivindicación", dijo Scholz.
"Para mí se trata de la dignidad de los ciudadanos. Eso es, sin embargo, lo que quizás nos distingue en esta cuestión", añadió.
Un sondeo posterior al encuentro, en el que también participó Annalena Baerbock, de Los Verdes, y en el que se trataron temas que van desde el cambio climático hasta la digitalización y la seguridad, dio como ganador a Scholz, con lo que éste ha arrasado en los tres debates.
Antes del encuentro, un sondeo de INSA para Bild am Sonntag situaba al SPD con un 26% de apoyo, estable desde hace una semana, mientras que el bloque conservador de la Unión Cristianodemócrata de centro derecha de Merkel y su partido hermano bávaro, la Unión Socialcristiana, sumaban medio punto porcentual, para situarse en el 21%.
