El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha manifestado este domingo a los presidentes de las comunidades autónomas la "necesidad de un Pacto de Reconstrucción Económica y Social" una vez pase la amenaza de la pandemia de coronavirus y les ha invitado a formar parte de él porque, a su juicio, hay que transmitir un "mensaje de coordinación, colaboración y cooperación" y que los ciudadanos vean "juntos" a partidos e instituciones.
Según han informado fuentes autonómicas, Sánchez ha explicado que el Gobierno quiere que "todos los sectores representativos de la sociedad estén presentes en la elaboración de este acuerdo nacional", esto es, los partidos políticos presentes en el Congreso, los gobiernos de comunidades autónomas, y los agentes sociales y económicos. Un escenario que no parece factible, sobre todo, teniendo en cuenta que las comunidades autónomas gobernadas por el Partido Popular son reacias a esta unión.
Tal y como les ha dicho Sánchez al inicio de la quinta videoconferencia que ha mantenido con los presidentes autonómicos desde que se decretó el estado de alarma, "en un Estado tan descentralizado como el nuestro, no tendría ningún sentido hacerlo sin las comunidades autónomas".
Tras destacar que hace su propuesta "de corazón y de buena fe", el jefe del Ejecutivo les ha traslado que es "primordial" trasladar un "mensaje de coordinación, colaboración y cooperación", ya que, aunque entiende que hay "discrepancias" en algunas cuestiones como el grado de contundencia de la respuesta económica y social, "es importante que la ciudadanía vea a todos los partidos e instituciones juntos".
CRITICAS DE PRESIDENTES DEL PP
Pero la propuesta de Sánchez ha sido recibida con críticas por algunos presidentes autonómicos del PP y por el presidente vasco, Iñigo Urkullu, que le han reprochado que no cuente con las comunidades autónomas para tomar las decisiones.
Este ha sido el caso del presidente andaluz, Juan Manuel Moreno o de la presidenta de la comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quienes se han quejado de la falta de claridad, de liderazgo y de estrategia en el Gobierno para organizar la respuesta a la pandemia.
Moreno incluso le ha apuntado que si escuchara a las CCAA podría evitar algunos problemas innecesarios y tanto él como Ayuso han puesto encima de la mesa el aluvión de dudas que hay entre los ciudadanos sobre la decisión de retomar mañana la actividad de actividades no esenciales, sobre todo sobre el uso de mascarillas y guantes.
También el presidente de Castilla y León, Alfonso Fenández Mañueco, se ha quejado de no conocer las decisiones por los cauces establecidos con el Gobierno, sino a través de los medios de comunicación y ha pedido aportar entre todos para fortalecer al Estado autonómico.
En cuanto a los pactos que ha propuesto Sánchez para la Reconstrucción, unos segundos pactos de la Moncloa, algunos presidentes autonómicos del PP le han recriminado que les pida adhesión sin concretar nada. Por ello, han reclamado que el Gobierno concrete primero lo que propone o quiere hacer para después poder manifestarse al respecto.
URKULLU Y TORRA
Y en esa misma línea ha ido el lehendakari Iñigo Urkullu, quien ha exigido "certezas" sobre los acuerdos de Estado que plantea Sánchez. Aunque ha ofrecido la colaboración del Gobierno vasco, ha dejado claro que "antes de debatir sobre su envoltorio, deberíamos trabajar los contenidos específicos que nos ayuden a valorar propuestas y respuestas eficaces con una mirada a medio y largo plazo", ha añadido.
Además, se ha quejado largamente de las formas del Gobierno y ha dicho que cada vez le resulta "más difícil soportar esta permanente escenificación" a la que recurre el Gobierno de Pedro Sánchez, y le ha pedido "certezas" sobre sus planes ante la pandemia del coronavirus, que el trabajo sea más "cooperativo" con las CCAA, con una comunicación fluida y anticipada.
Por ello, le ha reclamado una "reconsideración urgente" sobre el formato y método de trabajo "no compartido", porque "no es admisible la desorientación que provocan", y le ha exigido claridad respecto a la 'desescalada', el 'plan de vuelta a la normalidad' y los supuestos acuerdos de Estado, que a su juicio, deben hacerse "desde la especificidad y la singularidad".
Estas quejas han venido precedidas de una carta que ha enviado el presidente catalán, Quim Torra, a Pedro Sánchez en la que le pide los "informes sanitarios y epidemiológicos" en los que se ha basado para ordenar el cese del confinamiento total.
En la carta, Torra reiteraba su petición de no levantar el confinamiento: "Vistos los datos epidemiológicos actuales en Catalunya, resulta necesario adoptar nuevas medidas que continúen limitando el contacto entre ciudadanos, protegiendo así a la población del riesgo de contagio". Y ha reiterado sus quejas durate la reunión.