El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Generalitat, Pere Aragonés, han acordado celebrar una nueva mesa de diálogo la última semana de julio en Madrid, con el objetivo de reconstruir la confianza entre el Gobierno y la Generalitat catalana.
Tras un encuentro de casi dos horas, celebrado este viernes en La Moncloa, ambos Ejecutivos han tendido puentes en sus relaciones, después de diez meses de alejamiento por el caso Pegasus, sobre el espionaje a 65 personas del ámbito independentista con dicho programa israelí.
El fondo de la reunión entre ambas Administraciones es el de pactar un “acuerdo metodológico para reforzar el proceso de negociación”. Los Ejecutivos han acordado “contribuir al fin de la judicialización del conflicto político garantizando la seguridad jurídica” y retomar la mesa de diálogo con al menos dos encuentros antes de final de año.
No obstante, desde la Generalitat insisten en que la "normalización" de las relaciones no podrá llegar hasta que se vea en los próximos meses si se detiene la vía judicial y "la represión que vive el movimiento independentista" y si se "reconstruye la confianza" entre los ejecutivos.
El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, por su parte, se ha mostrado más optimista y ha afirmado que "hubo una década de enfrentamiento y ahora necesitamos trabajar mucho, dialogar mucho y acordar mucho para avanzar en ese reencuentro que deseamos entre catalanes y de Cataluña con el resto de España".
La última reunión formal entre ambos dirigentes tuvo lugar el pasado 15 de septiembre de 2021, en el marco de la mesa de diálogo, que se ha celebrado hasta en dos ocasiones, una con Quim Torra como presidente, y la última hace diez meses.
La reunión de este viernes ha estado marcada por la decisión del abogado general del Tribunal de Justicia de la UE de dar la razón al juez del Tribunal Supremo, Pablo Llarena, concluyendo que los tribunales belgas se extralimitaron al denegar la entrega a las autoridades españolas del exconseller Lluis Puig, lo que abre la puerta a que el expresidente catalán Carles Puigdemont pueda ser entregado a la justicia española por el 'proces'.