El viceprimer ministro italiano, Matteo Salvini tendrá que esperar otra semana para seguir adelante con su plan de hacerse con el poder en Italia. Los líderes del Senado no han puesto fecha para votar la moción de confianza pero han acordado que el próximo día 20 comparezca el primer ministro, Giuseppe Conte, para aclarar la crisis que vive el país.
La Liga, el partido que dirige Salvini, anunció el pasado jueves una moción de censura en el Senado contra el primer ministro, Conte. La decisión se retrasaba hasta este martes, pero finalmente la cámara alta no ha fijado una fecha.
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Finalmente, el 20 de agosto será el día en el que se decidirá el futuro de Italia. La semana pasada, Salvini intentó forzar elecciones anticipadas y consolidar el poder en su partido. De manera que si el gobierno de Conte ya no tiene mayoría, el presidente de la República de Italia, Sergio Mattarella tendría que decidir si intenta una coalición alternativa o convocar elecciones generales.
El gobierno de Conte, una alianza entre la Liga y el Movimiento 5 Estrellas se ha estado desintegrando por desacuerdos políticos desde que se formó hace más de un año. "El liderazgo de Salvini en las encuestas significa que probablemente se convertirá en el próximo primer ministro de Italia", explican desde Bloomberg, a pesar de los últimos esfuerzos de la oposición para crear una nueva coalición que lo bloquee.
Por su parte, el líder del Movimiento 5 Estrellas, Luigi Di Maio, declaraba este lunes en un vídeo de Facebook que los esfuerzos de Salvini para derrocar al gobierno "son absurdos" y pidió a Salvini y y otros ministros de la Liga que renunciaran.
Unas nuevas elecciones podrían hacer que Salvini gane con mayoría absoluta en ambas ramas del parlamento por sí solo, aunque una alianza preelectoral con los de extrema derecha de Italia "podría proporcionar más comodidad".
El Movimiento 5 Estrellas ha estado en conversaciones con el Partido Demócrata de centroizquierda, según los medios italianos, en un esfuerzo por formar un gobierno "institucional" después del probable colapso del liderado por Conte. El objetivo sería sentar las bases para el presupuesto 2020, evitando un aumento automático del IVA por valor de 23.000 millones de euros y cambiar el sistema de votación del país.
Sin embargo, el mismo lunes, el líder del Movimiento descartaba un acuerdo con el Partido Democráta.
