El rey emérito, Juan Carlos I, ha iniciado el trámite para presentar una declaración ante la Agencia Tributaria y regularizar así su situación fiscal, según han trasladado sus abogados al Gobierno a través de un escrito.
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Este documento está siendo analizado por Hacienda, que debe responder en los próximos días si acepta o no la regularización pedida por el emérito o, en su defecto, le exige aclaraciones, además de notificarle el importe a pagar.
Según apunta el diario El País, la declaración del emérito no está relacionada con sus posibles bienes en el extranjero, sino con el uso de tarjetas bancarias tanto por parte de Juan Carlos I como de sus familiares, con fondos opacos del empresario mexicano Allen Sanginés-Krause, que a su vez está siendo investigado por la Fiscalía del Tribunal Supremo.
El rotativo añade que dicha declaración voluntaria lleva sobre la mesa desde que Corinna Larsen declaró que Juan Carlos I le había regalado 65 millones de euros procedentes de una donación que le hizo el rey de Arabia Saudí, Abdalá bin Abdelaziz.
Por su parte, cabe recordar que el rey emérito lleva cuatro meses en el Golfo como huésped del jeque Mohamed Bin Zayed, príncipe heredero de Abu Dabi y gobernante de hecho de Emiratos. Hasta el momento, solo se le ha conocido una visita, la de una de sus hijas, la infanta Elena.
