La sorpresa en la segunda vuelta de las elecciones legislativas de este pasado domingo en Francia se ha convertido en el 'mini-cisne' negro del momento que viene a sumarse a las múltiples preocupaciones que ya asolan los mercados.
Aunque había dudas, se esperaba que Emmanuel Macron no perdiera la mayoría absoluta del Parlamento, algo que finalmente ha ocurrido. También se esperaba un mejor resultado para Jean-Luc Melenchon y su formación de izquierdas NUPES, que ha decepcionado, y un resultado mucho peor para la extrema derecha de Marine Le Pen que, sorprendentemente, ha logrado el mejor de su historia (de 8 diputados en 2017 a 89).
Ahora preocupa lo que ya preocupaba después de que Emmanuel Macron ganara las presidenciales el pasado mes de abril: que una pérdida de la mayoría en el Parlamento le impida llevar a cabo sus reformas. Y no sólo eso, también preocupa que esta situación debilite la posición de Francia al frente de Europa.
"La posición (de Macron) a nivel europeo se verá debilitada si ya no puede controlar la agenda interna, que a menudo se entrelaza con la europea", señalan los expertos de Berenberg, mientras que Citi considera que esta situación se trasladará a la escena internacional, "donde un frágil equilibrio político interno podría limitar la capacidad de liderazgo de Francia en Europa".
El único socio potencial ahora de Emmanuel Macron para crear una coalición viable es el partido de derechas Les Republicains. Esto implicará, tal y como añade Citi, un desplazamiento de la política francesa hacia el lado conservador del espectro. Desde Citi subrayan también que el resultado electoral hace menos probable que se produzcan "reformas ambiciosas" en los próximos años, algo en lo que están de acuerdo los analistas de Danske Bank.
TAMBIÉN HAY OPTIMISMO
Berenberg, por su parte, intenta mantenerse positivo. Aunque reconoce que sin una mayoría propia Macron tendrá más difícil llevar a cabo nuevas reformas, como el aumento de la edad de jubilación de 62 a 64 o 65, cree que sí que llegará a acuerdos pactando "caso por caso" con la derecha.
Asimismo, señala que es aún más importante que el Parlamento no revierta las actuales reformas firmadas por Macron -mercado laboral, impuestos de sociedades, regulaciones, educación...-, algo que considera "improbable". Según estos analistas, estas reformas "han contribuido a convertir a Francia en un lugar mejor para invertir y crear empleo".
Frente a las dudas del resto, la firma alemana cree que su planteamiento de hace tiempo de que las reformas de Macron convertirán a Francia en la economía más dinámica de la UE, por delante de Alemania, "probablemente siga siendo en gran medida acertada".
RaboBank también opta por ver el vaso 'medio lleno'. La buena noticia, en su opinión, es que, aunque a Emmanuel Macron le haya ido peor de lo esperado, "seguirá teniendo la capacidad de nombrar al primer ministro y probablemente contará con los diputados de Les Republicains para aprobar las reformas".
Eso sí, reconoce que no está claro hasta qué punto la situación dificultará su agenda legislativa.