El presidente de Irán, Hassan Rouhani, ha viajado a Europa para reunirse con los líderes de Austria y Suiza con el fin de intentar salvar el acuerdo nuclear internacional que ha sido abandonado por Estados Unidos.
Este movimiento, sin embargo, podría dar lugar a un escenario "desordenado" respecto a Irán entre Estados Unidos y Europa y generar fricciones sobre este asunto, según ha señalado un experto a CNBC.
"Estados Unidos aumentará la presión no nuclear sobre Irán, los bancos y empresas europeos se pondrán del lado de Washington, mientras que los políticos europeos tratarán de crear o idear recortes en la arquitectura de sanciones internacionales, y todo esto constituye una disputa muy desordenada para Estados Unidos y sus aliados", dijo el martes Behnam Ben Taleblu, investigador del grupo de expertos de la Fundación para la Defensa de las Democracias, al espacio 'Squawk Box Asia' de CNBC.
El presidente Donald Trump retiró a Estados Unidos del acuerdo nuclear en mayo y está restableciendo las sanciones a Irán después de haber criticado el acuerdo y haber dicho que el país no cumplía con sus condiciones. Los países europeos - Alemania, Reino Unido y Francia- que negociaron el acuerdo nuclear iraní con China y Rusia en 2015, han dicho que están comprometidos con el mismo. Sin embargo, las empresas europeas y las instituciones financieras podrían ser castigadas mediante las llamadas 'sanciones secundarias' si hacen negocios con individuos o entidades iraníes una vez que las restricciones de EEUU regresen en agosto.
Rouhani dijo que espera que las naciones europeas presenten un paquete pronto para salvar el acuerdo nuclear. El lunes se reunió con su homólogo suizo, Alain Berset, y el presidente suizo reafirmó su apoyo al acuerdo, conocido oficialmente como Plan de Acción Integral Conjunto (PECAP).