El PP ha cosechado este domingo en Galicia un nuevo triunfo. Ha logrado revalidar su mayoría absoluta por quinta vez consecutiva, por lo que Alberto Núñez Fejóo, que puso toda la carne en el asador durante la campaña apoyando a su candidato Alfonso Rueda, sale reforzado de esta cita en las urnas y asesta a Pedro Sánchez su primer golpe tras lo ocurrido el 23J. Y es que los socialistas, encabezados por José Ramón Gómez Besteiro, han cosechado el peor resultado de su historia.
Los populares podrán seguir gobernando su bastión gallego otros cuatro años, tras haber conseguido mayoría absoluta, y es que han sumado un total de 40 diputados, solo dos menos de los que dejó Feijóo antes de poner rumbo a Madrid para liderar el PP nacional. El desgaste ha sido menor de lo previsto por las encuestas, mientras que la posible suma de la izquierda que se vaticinaba no se ha producido.
Es cierto que el BNG de Ana Pontón ha mejorado sus datos, con una subida de seis escaños hasta los 24, su mejor dato de la historia, pero lo ha hecho a costa del descalabro del PSdeG-PSOE, que se tiene que conformar con solo nueve sillones en el Parlamento gallego, cinco menos de los que tenía en la pasada legislatura.
La sorpresa la han dado Democracia Ouresana, que debutará en la Cámara autonómica al haberse colado con 1 escaño, y también Vox y Sumar, que se han quedado fuera al no lograr representación parlamentaria. Tampoco lo ha conseguido Podemos.
Aún quedan por escrutar los sobres con los votos de los 29.300 gallegos que residen en el extranjero, que se producirá el próximo lunes 26 de febrero, pero con los resultados que hay ahora sobre la mesa se puede decir que el PP ha dado un golpe en Galicia (los populares han gobernado la región durante 38 de los 42 años de autonomía) que, además, sirve a Feijóo para consolidar su liderazgo en Génova.
Cabe destacar que la participación en las elecciones gallegas ha superado el 67%, ocho puntos más que en 2020, convirtiéndose así en las autonómicas con mayor participación desde 2009.
REACCIONES DE LOS CANDIDATOS
Rueda ha asegurado, en su intervención para valorar los resultados, que "Galicia le ha mandado un mensaje a España, sin ninguna duda. El mensaje es que aquí no queremos chantajes" y que la región apuesta por la "igualdad", la "dignidad" y el "entendimiento".
"Galicia hoy votó por el sentidiño", ha afirmado, y ha agradecido la labor del líder de su partido que, en su opinión, "marcó el éxito de esta noche" y "es una parte muy importante de esta victoria". "Me voy a poner a trabajar para la Galicia del futuro", ha concluido.
Por su parte, Pontón, que ha logrado un nuevo hito para su partido, ha dicho que el BNG es la "esperanza" de todos aquellos que quieren cambio en Galicia. Aunque ha reconocido que "el resultado es insuficiente porque el objetivo era abrir un nuevo tiempo en Galicia", sí que ha mandado un mensaje a sus votantes: "Hay un antes y un después y no hay marcha atrás, hay una mayoría que no se conforma ni resigna a ver cómo Galicia va a menos".
También ha dicho que "la alternativa para construir un gobierno al servicio de la ciudadanía" es el BNG y que "vamos a conseguirlo en el futuro".
Gómez Besteiro ha admitido la derrota y ha prometido trabajo de "oposición" desde el parlamento gallego. "Ningún cambio es fácil ni se consigue de la noche para la mañana", ha señalado. De hecho, confía en la posibilidad de cambio si el PSdeG es "capaz de consolidar un proyecto que sea reconocido entre la ciudadanía" y sea la "alternativa real y segura" en Galicia.