- En el PSOE llegaron a creer que el pacto era posible hasta que Podemos decidió romper formalmente tras la reunión a tres
- Esta vía se mantuvo abierta desde el 21 de marzo hasta el 7 de abril
Sánchez abrió una vía secreta de diálogo con el partido de Pablo Iglesias, exploró todas las posibilidades de acuerdo posibles sin romper el pacto con Ciudadanos.
Tal y como informa El País, Pedro Sánchez trató de buscar un camino alternativo, tras varios encuentros fallidos, parte del equipo negociador del PSOE creyó posible llegar a un acuerdo, llevado a cabo por el talante dialogante de Íñigo Errejón. No obstante, los contactos se interrumpieron cuando se constató que el criterio de Iglesias y el número dos de Podemos era el mismo en cuestiones de fondo.
Tras la firma del acuerdo con Ciudadanos, la investidura fallida de Pedro Sánchez y un ir y venir de reuniones y declaraciones, los dirigentes de Podemos y el PSOE abrieron una vía paralela de diálogo con personas de su máxima confianza que se mantuvo entre el 21 y el 30 de marzo, que sobrevivió hasta el pasado 7 de abril cuando Iglesias compareció para afirmar que los socialistas estaban 'secuestrados' por Ciudadanos.
En el PSOE llegaron a creer que el pacto era posible hasta que Podemos decidió romper formalmente tras la reunión a tres
Esta vía alternativa la encabezaron en un primer momento los jefes de gabinete de ambas formaciones, Manuel Serrano e Irene Montero. Después los equipos se ampliaron. No obstante, según fuentes de El País, el desarrollo de estos contactos pusieron de manifiesto que las posibilidades de acuerdo siempre fueron remotas. La economía y la participación de Podemos en el Gobierno fueron las principales razones del fracaso y no el referéndum sobre Cataluña.
Mientras tanto, en el PSOE, muchos como Pedro Sánchez, daban por hecho el acuerdo, otros, por el contrario, se mostraban más escépticos. Finalmente, la dirección de Podemos tomó la decisión de romper la negociación con el PSOE entre la noche del 7 y la mañana del 8 de abril. Tras la reunión a tres de los equipos negociadores, en la que también estaba Ciudadanos. Desde la formación morada comprobaron que en este momento que no había lugar para el entendimiento.
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