- Susana Díaz se ha distanciado del resultado ajustado que defendían las encuestas y ha obtenido un 40% de los apoyos
- Patxi López, fuera de la batalla por liderar el partido, ha contado con un 10% de los votos
Pedro Sánchez recupera el liderazgo del PSOE y es el nuevo secretario general del partido reelegido por aproximadamente un 50% de la militancia. Se cierran así ocho meses de guerra abierta en el PSOE, desde que la falta de acuerdo por la postura que debía tomar el partido ante la investidura de Mariano Rajoy acabara con la dimisión del socialista. Ese mismo día se hizo cargo del partido un Gestora presidida por el presidente de Asturias, Javier Fernández, que planificó un periodo de interinidad más largo de lo normal que se ha extendido hasta este domingo, día en que ha tenido lugar la celebración de las primarias.
Susana Díaz, la inmediata rival de Sánchez en esta guerra interna por liderar el partido, se ha distanciado del resultado ajustado que defendían las encuestas y ha obtenido alrededor de un 40% de los apoyos, lo que supone una diferencia de diez puntos porcentuales. Asimismo, como se evidenció en la entrega de avales hace unas semanas, Patxi López ha quedado fuera de esta batalla y ha sido el tercero en discordia con el 10% de los sufragios.
El exsecretario general socialista ha ganado estas primarias en todas las comunidades autónomas salvo en Andalucía y Aragón, donde ha ganado Susana Díaz, y en Euskadi, donde ha resultado más votado Patxi López.
"El PSOE está aquí y va a hacer lo indecible por cambiar el rumbo del país, por cambiar la corrupción del PP, por mejorar sus vidas y las de sus hijos", ha dicho en su primer discurso tras ser reelegido secretario general. Y ha reiterado: "Hoy empieza todo, no acaba nada. Todos y todas votamos a distintos candidatos con una idea: que queríamos hacer del PSOE una organización nueva"
FIN A OCHO MESES DE GUERRA ABIERTA EN EL PSOE
Pedro Sánchez, el líder defenestrado por el Comité Federal del PSOE hace apenas ocho meses, regresa a la Secretaría General del partido gracias al apoyo mayoritario de las bases, que han elegido a un "militante de base en paro", como le gustaba presentarse en campaña a Sánchez, para tomar las riendas de un partido fracturado que tiene como reto definirse de nuevo para evitar caer en la irrelevancia.
Si Sánchez consiguió ser elegido líder socialista en julio de 2014 a pesar de ser un perfecto desconocido para la ciudadanía y la propia militancia gracias al apoyo de la presidenta andaluza, Susana Díaz, en esta ocasión ha sido su enfrentamiento con ella y con la mayoría de los barones de la formación lo que parece haber jugado a su favor.
UNA PARTICIPACIÓN "HISTÓRICA"
La jornada electoral en las filas socialistas, que empezó a las 10:00 horas de la mañana y ha culminado a las 20:00 horas, ha transcurrido con normalidad, según se ha encargado de informar el PSOE a través de su cuenta oficial de Twitter. A las 14:00 horas el dato de participación fue de un 51% del electorado, una cifra “muy alta”, según el portavoz de la Comisión Gestora, Mario Jiménez. Finalmente, cerradas las urnas, la participación de estos comicios internos socialistas ha sido del 85%, un dato "histórico", según Jiménez.
Nada más conocerse la victoria de Pedro Sánchez, Susana Díaz le ha llamado para felicitarlo. Una reacción diferente ha tenido el portavoz del grupo parlamentario socialista, Antonio Hernando, que ha anunciado inmediatamente la dimisión de su cargo al presidente de la Gestora, Javier Fernández. Patxi López, Albert Rivera, Pablo Iglesias, Ada Colau o Carles Puigdemont han sido otros de los políticos que han reaccionado a su victoria.
