Hacia una victoria cantada. A eso se dirigen Boris Johnson y su Brexit este viernes en una nueva votación que tendrá lugar en el Parlamento británico. Ahora, haciendo acopio de su nueva y aplastante mayoría, Johnson podrá con 365 de los 650 diputados en su poder marcar la nueva hoja de ruta de la salida británica de la UE que pasa por dos temas: el abandono de la comunidad europea el próximo 31 de enero de 2020 e impedir una extensión del periodo de transición hasta la salida total.
El proyecto de ley de Johnson busca "cumplir la promesa que hicimos a los británicos y dejar el voto del Brexit envuelto para regalo de cara a la Navidad", afirma el premier británico.
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Al presentar su texto, Johnson destacó que su proyecto de ley "marcará el comienzo de una nueva década en la que el Reino Unido brillará en el comercio, la innovación y la ciencia y se enfrentará a los desafíos globales con viejos amigos y nuevos en todo el mundo".
Una de las cuestiones más importantes que tratará el Parlamento es un periodo de transición hasta el 31 de diciembre de 2020 para permitir a las compañías adaptarse al nuevo entorno.
Por un lado, Bruselas cree que esto sería un periodo demasiado escaso para negociar la relación entre ambos de cara al futuro. Por otro, Johnson se opone a extenderlo y redactó en su borrador una cláusula para prohibir cualquier extensión. La voluntad de Johnson despierta cierto temor en el mercado a que el mismo 1 de enero de 2021 Reino Unido acabe saliendo de la UE abruptamente sin preocuparse por el estado de las negociaciones con Bruselas en ese momento.
