El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha estimado "para julio o agosto" el fin de la obligatoriedad de las mascarillas en espacios exteriores, siempre que, durante las próximas semanas, se mantenga "la prudencia que aconseja la situación".
El elevado ritmo de vacunación no solo ha permitido la finalización del estado de alarma, sino que también se acerca cada vez más la vuelta a la normalidad real.
Al final de una intervención en un acto en el complejo de la Ciudad de la Cultura de Santiago de Compostela, el presidente gallego ha afirmado que "si todos seguimos durante las próximas seis, ocho semanas, con la prudencia que aconseja la situación estoy convencido de que allá por el mes de julio, agosto, empezaremos otra vez a poner cara a todas las personas que vemos por la calle".
No obstante, ha hecho hincapié en que esto no será posible "en lugares cerrados", pero "sí en el exterior", que es lo que todas las personas están "deseando" y ha expresado su deseo de "ir mudando la mascarilla por la faz".
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Fuentes de la Xunta han aclarado que estas declaraciones se limitan a un deseo que no está planteado aún en el comité clínico, que dependerá de "si somos responsables" y que tendrá que plantearse a nivel nacional, a través del Comité Interterritorial.
Según la Sociedad Española de Epidemiología (SEE) el momento de despedirse de la protección facial dependerá de qué proporción de población se haya vacunado. "Si se ha alcanzado un 70% o más de población vacunada cabe pensar que la pandemia estará controlada porque se haya generado una inmunidad de grupo o inmunidad colectiva que limite sustancialmente la transmisión del virus", aseguran los expertos.
AGRADECE AL TSXG QUE HAYA ACEPTADO LAS RESTRICCIONES
Por otra parte, el presidente de la Xunta ha agradecido la decisión del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) de avalar las restricciones impuestas por la Xunta tras el fin del estado de alarma, lo que, en su opinión, acredita que han sido tomadas con "rigor".
En declaraciones tras la reunión del Consello de la Xunta, Núñez Feijóo ha valorado especialmente que el tribunal haya aceptado como "criterio epidemiológico de riesgo" las reuniones entre no convivientes entre la una y las seis de la madrugada, cuando está cerrada la hostelería, y haya ratificado su prohibición.
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"No podemos más que agradecer la sensibilidad del poder judicial, del TSXG, y felicitar al comité clínico porque, una vez más, sus medidas razonadas y epidemiológicamente construidas, con metodología y con rigor" han sido avaladas, ha dicho el presidente gallego.
También ha considerado que el TSXG acepta todas la propuestas por ser "proporcionales y por tener un período temporal" y ha asegurado que si después del 21 de mayo, cuando finalizan, la situación "empeora" se pedirá la autorización para más medidas restrictivas similares.
Núñez Feijóo se ha mostrado satisfecho de conseguir el aval judicial para "el razonamiento hecho por la asesoría jurídica de la Xunta en base al criterio del comité clínico siguiendo protocolos que en Galicia se llevan aplicando desde hace más de un año" y ha comprometido seguir trabajando con el mismo "rigor".
En definitiva, ha sido "un buen trabajo" tanto del comité como del Servizo Galego de Saúde (Sergas) y de la asesoría jurídica "y una enorme responsabilidad de la fiscalía superior y de la sala de los contencioso del TSXG", ha concluido.
El Tribunal Superior gallego da luz verde a las limitaciones de reuniones entre no convivientes y también aprueba que se mantenga el toque de queda a las 23 horas, y el cierre perimetral y de la hostelería decretado por la Xunta en los municipios con un nivel máximo de restricciones.
