La primera ministra de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, ha comunicado este domingo que las elecciones generales se han retrasado cuatro semanas, concretamente se celebrarán el 17 de octubre, debido a la crisis sanitaria originada por la COVID-19 que ha supuesto el cierre de la principal ciudad del país, Auckland.
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IAG y Meliá erráticas: Italia también impone restricciones al turismo españolArdern ha explicado que, debido a la excepcionalidad de la situación actual, la decisión se ha tomado después de deliberar con el resto de fuerzas políticas del país, a pesar de que la posposición de las elecciones es competencia exclusiva del cargo de primer ministro.
Las autoridades sanitarias neozelandesas notificaron a principios de semana sus primeros casos de transmisión local después de 102 días sin contar ninguno, a continuación, se confirmaron una docena más de contagios asociados a este rebrote, identificado en una familia de Auckland.
La primera ministra también ha anunciado que el Partido Laborista no celebrará su campaña electoral, y ha especificado que el resto de partidos políticos decidirán si llevar a cabo o no este tipo de actos previos a las votaciones. Por ahora Nueva Zelanda ha confirmado algo más de 1.600 contagios y 22 fallecidos. La ciudad de Auckland sigue en cuarentena, únicamente se puede salir a la calle para hacer deporte o adquirir productos de primera necesidad.