La decisión del nuevo alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, sobre la moratoria de multas en Madrid Central no ha gustado al diario neoyorkino. "Madrid se dirige en dirección opuesta" señalan "el cambio de sentido de esta medida hace que sea la primera gran ciudad europea importante que revierta la prohibición de los vehículos de altas emisiones", destacan en un artículo.
A partir de este lunes no se multará a los vehículos que accedan a Madrid Central, pero sí se les avisará de que han circulado por un área restringida. La moratoria de multas se prolongará por lo menos hasta septiembre.
Una decisión que critica el diario, explicando que los gobiernos locales de toda Europa han pasado más de una década introduciendo leyes que restringen el acceso de vehículos a las áreas centrales de muchas ciudades "en un esfuerzo por mejorar la calidad del aire para residentes y visitantes por igual" apunta el New York Times.
Pero a partir de este lunes, "Madrid se dirige en dirección opuesta". Los conductores ya no harán frente a multas por acceder a este área del centro de la ciudad, conocida como Madrid Central, "que se convirtió en una zona de bajas emisiones a finales de noviembre" tras la prohibición de la entrada a la mayoría de los vehículos.
El cambio de sentido de la política hace que Madrid "sea la primera ciudad europea importante que revierta la prohibición de los vehículos de altas emisiones y permita que los automóviles accedan sin restricciones a esta área".
Según el periódico, Londres se convirtió en 2003 en la primera ciudad europea importante en obligar a los conductores a pagar una tarifa de congestión para ingresar al corazón de la ciudad. Desde Bruselas a Milán, varias otras ciudades europeas siguieron su ejemplo, introduciendo sus propios sistemas de tarifas o prohibiciones de tráfico, dirigidos a vehículos de altas emisiones como camiones y vehículos diésel más viejos.
Y en Alemania, los fallos judiciales han obligado a Munich y otras ciudades a reducir el tráfico.