• La también portavoz del Govern ha expuesto que más del 80% de catalanes son favorables a la convocatoria de un referéndum
  • Munté critica que en lugar de propuestas para seducir a la sociedad, el Gobierno ha iniciado "una campaña de persecución legal a cargos electos por el pueblo catalán"
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La consellera de Presidencia de la Generalitat, Neus Munté, ha asegurado que la negativa del Gobierno central a celebrar un referéndum en Catalunya "situaría a España en la lista de gobiernos populistas y autoritarios que parecen estar echando raíces en ciertas esquinas de Europa".

"Esperamos que el Gobierno español será maduro y responsable, y afrontará la situación catalana como lo haría cualquier país democrático", ha aseverado en un artículo de opinión publicado este sábado en la revista 'Newsweek'.

La también portavoz del Govern ha expuesto que más del 80% de catalanes son favorables a la convocatoria de un referéndum y que así se han expresado la mayoría de diputados del Parlament: "¿Puede ser un delito votar? No lo creemos", plantea.

"Esperamos que el Gobierno español será maduro y responsable, y afrontará la situación catalana como lo haría cualquier país democrático"

La también portavoz del Govern ha expuesto que más del 80% de catalanes son favorables a la convocatoria de un referéndum y que así se han expresado la mayoría de diputados del Parlament: "¿Puede ser un delito votar? No lo creemos", plantea.

Recuerda los referéndums celebrados en Escocia y Quebec con el beneplácito de los gobiernos británico y canadiense, respectivamente, y que en ambos casos ganaron las opciones contrarias a la independencia por las "atractivas ofertas" que hicieron los estados a los votantes.

"La gente debe permanecer parte de un Estado por su propia voluntad, porque están convencidos de sus beneficios y no porque la permanencia viene impuesta o es fruto del miedo", defiende.

Munté critica que en lugar de propuestas para seducir a la sociedad, el Gobierno ha iniciado "una campaña de persecución legal a cargos electos por el pueblo catalán", y acusa al Ejecutivo español de usar la policía para extender rumores sobre los representantes políticos de Catalunya, algo que califica de guerra sucia.

En este contexto cita el juicio al expresidente de la Generalitat Artur Mas y los exconsellers Francesc Homs, Joana Ortega e Irene Rigau por el proceso participativo del 9N de 2014 y la reciente querella contra la presidenta del Parlament, Carme Forcadell.

"Todos estos juicios golpean el alma democrática de cualquier ciudadano a la vez que son enormes anomalías en la Europa democrática", afirma, y lamenta que se estén recuperando actitudes autoritarias propias del franquismo, según ella.

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