La Comunidad de Madrid se plantea limitar las reuniones en terrazas y restringir el ocio nocturno para limitar los rebrotes, que cada vez aumentan más en toda España. Así lo ha anunciado el viceconsejero de Salud Pública y Plan Covid-19, Antonio Zapatero, este viernes. La decisión definitiva se tomará la semana que viene, cuando se conocerán las nuevas medidas preventivas que se van a adoptar par evitar contagios.
Zapatero, en una entrevista en Onda Madrid, ha explicado que el Gobierno que preside Isabel Díaz Ayuso estudia en estos momentos diversas iniciativas que ayuden a evitar las aglomeraciones de personas, y se ha puesto encima de la mesa la opción de limitar el número de personas que acuden a las terrazas y ejercer un mayor control sobre el ocio nocturno, que se está convirtiendo en el foco de buena parte de los nuevos brotes que se están detectando.
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El viceconsejero madrileño ha recordado que los aspectos que influyen en la transmisión del virus son las aglomeraciones y la movilidad que se han recuperado con la nueva normalidad, y que ha hecho que la población retome el contacto social. Por eso Madrid, viendo lo que está pasando en otras regiones, ha decidido plantear nuevas restricciones. Y eso pese a que, de momento, no ha implantado el uso obligatorio de la mascarilla en espacios públicos, pese a que se pueda mantener la distancia de seguridad, como sí han hecho la mayoría de regiones.
Este jueves el consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, escudó la decisión en que el Ministerio de Sanidad no consideraba que fuese algo necesario y en que la comunidad es en la que más se usa la mascarilla, aunque Zapatero ha dicho este viernes que no se cierra la puerta a nada. Es decir, que Madrid puede reconsiderar su decisión en función de cómo evolucione la pandemia.
PREOCUPA, Y MUCHO, BARAJAS
Por otro lado, sobre al aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid-Barajas y el control que la comunidad quiere que se ejerza en él, Zapatero ha dicho que es "preocupante" que se hayan detectado ya 77 casos importados, sobre todo teniendo en cuenta que han transitado por estas instalaciones 150.000 personas en lo que va de mes.
Son en su mayoría casos que proceden del continente americano, y por eso Madrid cree necesario que se obligue a los turistas a presentar una PCR negativa a la hora de embarcar (en origen) para aumentar los controles y ayudar así a frenar la transmisión de la enfermedad.
Por último, Zapatero ha remarcado que para controlar posibles casos primero hay que diagnosticar, y en este aspecto ha asegurado que Madrid realiza un esfuerzo "notabilísimo" con 30.000 pruebas PCR diarias y otras 30.000 serológicas, para un total de 60.000 cada jornada.
