Los desafíos que 2017 plantea a PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos

Cada partido tiene sus propios problemas y la forma en que los enfrenten determinará su éxito o su fracaso ante la opinión pública y sus votantes

Cada partido tiene sus propios problemas y la forma en que los enfrenten determinará su éxito o su fracaso ante la opinión pública y sus votantes. Y aunque los inicios del nuevo año se presentan bastante ‘movidos’, puede que la tranquilidad sea la tónica que domine 2017. Al menos así lo cree Emilio Serrano, politólogo y consultor de comunicación en Asesores de Comunicación Pública. “Será un año mucho más tranquilo, en el que habrá reflexiones más sosegadas al margen del ritmo de las convocatorias electorales”, explica.

El experto cree que en el nuevo año podrían verse “bastantes acuerdos” y “avances” en “asuntos clave”, que de producirse podrían hacer que la ciudadanía “note en su bolsillo la recuperación económica” y que ésta “se consolide”. También ve posible que se alcance un acuerdo que permita solucionar “la situación en Cataluña y sus relaciones con el Estado”.

El politólogo Eduardo Bayón no lo ve de la misma forma. “En este 2017 asistiremos a un primer trimestre con los partidos centrados en sus disputas internas previas a sus congresos”, señala el experto, y es que PP, Podemos y C’s los celebrarán en febrero, y el del PSOE aún no tiene fecha. Además, pone el acento sobre la que cree que será la cuestión central en el inicio del nuevo año: la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE).

Las cuentas públicas para 2017 serán negociadas “con la amenaza de una nueva cita electoral en caso de no ser aprobadas”, una amenaza que “será recurrente también en cualquier otra negociación posterior y que a partir de mayo será real”, al cumplirse el plazo que marca la ley desde la disolución de las Cortes de la anterior legislatura para sacar adelante los nuevos PGE, dice Bayón. “Eso faculta al presidente del Gobierno para poder convocar nuevas elecciones”, afirma, y cree que es una baza que tanto el PP como el propio Mariano Rajoy podrían jugar.

Por su parte, Ignacio Martín Granados, politólogo y miembro del consejo directivo de la Asociación de Comunicación Política (ACOP), apunta a un 2017 con “bastantes retos por delante” para los partidos y señala que todo va a depender del líder que se elija en los mencionados congresos para abanderar el PP, el PSOE, Podemos y Ciudadanos. “En función de la persona que salga, se adoptarán unas u otras medidas y será más o menos fácil llegar a acuerdos con otras formaciones”, apunta. Pero recuerda que también serán importantes “los equipos, el segundo nivel, que son los que van a hablar y negociar con los equipos de otros partidos para tratar de llegar a acuerdos”.

Sea como sea, cada partido tiene sus propios ‘líos’ y preocupaciones que afrontar en los próximos doces meses. Estos son los retos a los que se enfrentan.

EL PP DEBE SOBREPONERSE A LA ‘ESPANTADA’ DE AZNAR

Tal y como explica Martín Granados, la decisión del expresidente del Gobierno José María Aznar de renunciar a la presidencia de honor del PP ha puesto de manifiesto que en el seno del partido “también hay división”. Hay dos alas, una más dura y conservadora, y otra “más light y más cercana a los postulados de C’s”, remarca el experto. Los ‘populares’, además, tienen el reto de renovar el partido. “Rajoy está teniendo éxito, pero por la debilidad de sus oponentes, por demérito del resto. Ahora debe sentar las bases para facilitar un cambio pausado que apueste por nuevos liderazgos y nuevas caras”, apunta.

Bayón también habla de la división del PP, que ha quedado de manifiesto tras la salida de Aznar. “Aún está por ver cómo acaba. No sería descartable que se articulase algún movimiento político” en torno al expresidente del Gobierno, afirma el experto, que explica que los “ataques” de Aznar a la actual vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, han sido el “detonante” definitivo de una relación entre el PP y la Fundación FAES que preside -hasta ahora el ‘think tank’ de referencia de los ‘populares’- que “estaba rota desde hace años”.

La división del PP ha quedado de manifiesto tras la salida de Aznar y "aún está por ver cómo acaba", dicen los expertos

Emilio Serrano, por su parte, apunta a otro “gran reto” para el PP en 2017: “Hacer efectiva su acción de gobierno”. Es fundamental, dice el politólogo, que sea capaz de “sacar adelante sus iniciativas sin perder demasiadas votaciones en el Congreso de los Diputados, y sin que se deroguen las políticas aprobadas en la legislatura anterior”. Algo en lo que, hasta el momento, no ha tenido demasiado éxito.

UN NUEVO LÍDER QUE PACIFIQUE EL PSOE

En cuanto al PSOE, Bayón recuerda que es el único de los cuatro grandes partidos que aún no tiene fecha clara para su congreso, y también es el único que tiene una “dirección política interina”, la de la gestora que preside Javier Fernández desde la dimisión de Pedro Sánchez a principios de octubre. “Se habla de junio o julio, y si para entonces la situación no ha cambiado ni surgen terceras vías distintas a Sánchez y Susana Díaz, habrá un choque de trenes entre los dos bloques y las heridas no serán cerradas. Quedará un partido igual de dividido o más”, indica.

Serrano, por su parte, se refiere a la imagen “poco favorable” que ofrece ante la opinión pública el hecho de que el Partido Socialista parezca dividido. “Si no sale fortalecido del cónclave en el que se elija al nuevo líder puede haber graves consecuencias y eso podría llevarle a desperdiciar gran parte de la legislatura”, dice. Martín Granados recuerda que el nuevo secretario general del PSOE tendrá que “pacificar el partido” y “devolverle su identidad”. “Debe encontrar un líder fuerte, atractivo, que convenza a los ciudadanos y vuelva a conectar con los votantes de izquierda”, remarca el experto.

PODEMOS Y EL ‘SORPASSO’ DEL PSOE EN EL CONGRESO

Sobre Podemos, Martín Granados tiene claro cuál es el principal problema al que se enfrenta: la “guerra civil interna” que se ha desatado fruto de su rápido crecimiento desde 2014. “Los problemas han surgido ante el periodo de relativa calma electoral que se presenta. Hay que poner el partido en orden y eso ha generado problemas” en el seno de la formación morada, dice el politólogo. “Podemos debe encontrar su identidad en el Congreso, donde está sufriendo el ‘sorpasso’ del PSOE, que tiene mucha más experiencia y se maneja mejor en cuestiones parlamentarias”, afirma.

Serrano también apunta en la misma dirección: “Parece que el PSOE ha tomado la delantera y que Podemos ha perdido capacidad institucional debido a su proceso interno, tan dilatado en el tiempo y tan convulso”. Mientras que el politólogo Eduardo Bayón señala que la disputa de la formación morada debe ser tenida “muy en cuenta” porque puede acabar provocando “cierta indiferencia” de los votantes de izquierdas, y lo mismo ocurre en el caso de los socialistas. “Eso explica, en parte, por qué los votantes que pierde el PSOE se van a la abstención y no optan por otras opciones políticas, y por qué Podemos lleva meses estancado electoralmente”.

LA FALTA DE ‘RECURSOS HUMANOS’ DE CIUDADANOS

C’s tendrá que cerrar las diferencias que arrastra y decidir "cómo gestionar el hiperliderazgo que ejerce Albert Rivera"

En cuanto a C’s, Serrano apunta que el partido de Albert Rivera se enfrenta en 2017 al reto de “recuperar la iniciativa parlamentaria y el protagonismo político”, dado que ha quedado relegado a un “segundo plano” desde que el PP y el PSOE se ponen de acuerdo en algunos asuntos importantes. “Ahora llegan dos años sin procesos electorales en España y es el mejor momento para establecer prioridades políticas, y también para ajustar la acción política de la primera mitad de la legislatura”, dice el experto.

Bayón apunta que el “recorrido” de Ciudadanos como partido con “relevancia” en el panorama nacional “aún está por ver”, y señala que el congreso que celebrará la formación naranja en febrero será importante. En él, C’s tendrá que cerrar las diferencias que arrastra y decidir “cómo gestionar en un futuro próximo el hiperliderazgo que ejerce Albert Rivera”. Martín Granados habla de la escasez de líderes alternativos a Rivera, “por la falta de recursos humanos” y porque parece que el presidente de la formación “no está por la labor de compartir el poder”, y apunta que el principal reto será el de “hacerse valer” y demostrar que es un “partido útil”.