Junts per Catalunya (JxC) rompe el Govern catalán. Las bases del partido independentista han decidido en una consulta interna que los posconvergentes salgan del Ejecutivo de coalición que forman junto a Esquerra Republicana (ERC). Un 55% de los participantes ha votado en contra de permanecer en el Gobierno, mientras que un 42% se ha mostrado a favor en una votación en la que han participado el 79% de los afiliados a la formación catalana.
Tras conocerse el resultado, Junts ha celebrado una ejecutiva extraordinaria para analizar estos datos. Laura Borràs, presidenta del partido, ha anunciado que pasan a formar parte de la oposición en el Parlament. "Junts pasa a la oposición firme y responsable, para seguir trabajando con toda la intensidad". Asimismo, Jordi Turull, secretario general, ha avanzado que la formación no solo no se romperá, sino que saldrá "más fuerte y plural".
📌 RESULTATS VOTACIONS CONSULTA
— Junts per Catalunya🎗 (@JuntsXCat) October 7, 2022
🗳️ Partipació: 79,18%
SI: 42,39%
NO: 55,73%
EN BLANC: 1,88% pic.twitter.com/a9eUmgELfm
"Si hablamos de perdedores y ganadores, Junts gana y Pere Aragonès pierde", ha indicado Borràs, que ha recalcado que "la militancia no quiere estar en un gobierno que no avance hacia la independencia". Tanto Turull como Borràs se han comprometido a trabajar "para recoser la voluntad del independentismo" y a "no desentenderse de nada ni nadie".
Con la salida de JxCat se rompe la coalición de gobierno en Cataluña. A partir de ahora, ERC gobernará en solitario y remodelará el Govern. "En los próximos días renovaré el consejo ejecutivo e incorporaré nuevos consejeros y consejeras", ha anunciado.
Aragonès también ha rechazado adelantar las elecciones y ha abogado por buscar “grandes consensos” para “asegurar la estabilidad de las instituciones”. “Continuaré gobernando, no abandonaré a la ciudadanía”, ha proclamado antes de dar por empezada “una nueva etapa”.
No obstante, el Govern también se enfrenta a un escenario muy complicado, ya que solo cuenta con 33 diputados en el Parlament, lo que obligará a Aragonés a buscar el apoyo de otros partidos para sacar adelante sus iniciativas. El primer gran reto al que tendrá que hacer frente será el de aprobar los Presupuestos de la Generalitat de 2023,
La crisis de gobierno comenzó cuando JxCat planteó con someter a una cuestión de confianza a Aragonès si no cumplía con el acuerdo de investidura. Como consecuencia de ello, el vicepresidente Jordi Puigneró fue destituido por "pérdida de confianza", después de que este no informase al 'president' de los planes de su grupo.
A pesar de haber intentado acercar posturas para salvar la coalición, Junts decidía preguntarle a sus bases si quería permanecer el Govern.
Después de conocerse esta noticia, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha abogado por facilitar la estabilidad gubernamental en Cataluña y ha señalado que que en momentos tan difíciles como el actual, con las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania y de la pandemia de coronavirus, "el valor de la estabilidad es fundamental".