Llama a la "no violencia" porque, si el independentismo pierde "ese relato", lo perderá "todo"
BILBAO, 21 (EUROPA PRESS)
El expresidente de la ANC Jordi Sànchez, encarcelado en la cárcel de Lledoners por el caso del 'procés', afirma que "tiene mucho valor y simbolismo" que se reúnan el presidente del Gobierno central, Pedro Sánchez, y el president, Joaquin Torra, y destaca que, "en algún momento del acuerdo, debe figurar la casilla de la independencia". Además, llama a los CDR a la "no violencia" porque, si el independentismo pierde "ese relato", lo perderá "todo".
En una entrevista publicada en el Grupo Noticias, recogida por Europa Press, Sànchez recuerda que su propuesta "siempre ha sido la de un encuentro bilateral" entre ambos Ejecutivos y señala que "no hay alternativa al diálogo".
No obstante, apunta que, si en ese diálogo no hay "disposición a entrar al fondo" de la cuestión, se va a ir a "una eternización del problema catalán". "Podemos aceptar modular la situación política, diferir en el tiempo las distintas fases de la solución, pero hay que dialogar sobre el fondo", advierte.
A su juicio, "es positivo" que se reúnan Sánchez y Torra, así como ministros y consellers, y cree que "supone un mensaje también para el independentismo de que el diálogo no es un acto de estabilidad". Además, subraya que hablar es algo previo "a la negociación y al acuerdo". "Ésa imagen tiene mucho valor y simbolismo. Políticamente es muy relevante", remarca.
En todo caso, apunta que, "en algún momento del acuerdo", deberá "figurar la casilla de la independencia, contrapuesta a la de la dependencia". "Tiene que estar sobre la mesa, si no, sería un fraude" asegura.
CONSEJO DE MINISTROS
Jordi Sànchez considera que la celebración del Consejo de Ministros este viernes en Cataluña "es un error político y una falta de prudencia, si de lo que se trata es de abrir el diálogo entre Madrid y Barcelona".
Por otra parte, se dirige a los CDR para hacerles un llamamiento "a la no violencia, siguiendo el modelo del 1-O de 2017". "Ésa es nuestra fuerza. Si perdemos el relato de la violencia, lo vamos a perder todo", avisa.
Sin embargo, destaca que "el pacifismo no es no manifestarse o no protestar", sino "tener un compromiso firme de no caer en la violencia y ofrecer resistencia pacífica". "Ninguna capucha y ningún destrozo de mobiliario urbano, es lo que pido", añade.
El expresidente de la ANC apunta que el independentismo catalán tiene como hoja de ruta "garantizar las instituciones de autogobierno, utilizar el mandato de las urnas para gobernar y tener capacidad para ganar una solución política democrática mediante un referéndum acordado". "No es fácil y, para ello, es imprescindible la movilización ciudadana, incluida la posibilidad de la desobediencia civil", indica.
En cuanto al juicio al que se enfrentará en enero en el Tribunal Supremo por el 'procés', manifiesta que nunca ha visto "una rebelión donde 40.000 personas concentradas durante largas horas no intenten asaltar el edificio".