A menos de un mes para que se celebren las elecciones generales, los partidos ya han puesto sobre la mesa las medidas económicas que piensan instaurar si llegan al poder. El PP es la única formación que tiene propuestas que benefician a la banca, mientras que una victoria de PSOE, Ciudadanos, Unidas Podemos o Vox perjudica a este sector, según un informe realizado por XTB.
Los populares apuestan por un “blindaje fiscal” de los planes de pensiones y de cualquier otro tipo de ahorro destinado a la jubilación. Además, se niega a implementar el impuesto a las transacciones financieras que había anunciado el PSOE y que gravaría las operaciones en los mercados de valores. Con esto, las empresas más beneficiadas serían BBVA, CaixaBank y Bolsas y Mercados Españoles (BME).
Estas mismas compañías serían las más perjudicadas si Pedro Sánchez se queda en Moncloa. El PSOE propone ese impuesto a las transacciones financieras y establecer un tipo mínimo al impuesto de sociedades para los bancos, que será superior al de otros sectores.
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En una línea similar se mueve Ciudadanos, que plantea un tipo impositivo más elevado para las SICAV, menores comisiones en el pago con tarjeta y una revisión en la comercialización de productos bancarios. Por su parte, Unidas Podemos es el que más castigaría a la banca, con un plan de reestructuración y cancelación de deuda que incluye la dación en pago retroactiva. Además, la formación liderada por Pablo Iglesias apuesta por la cancelación de la deuda a las personas que ya entregaron su vivienda al banco.
El programa de Vox también perjudica a la banca, con propuestas como un derecho blindado a la pensión y eliminar la doble tributación de las pensiones públicas. Estas ideas restarían atractivo a los planes de ahorro privados que ofrecen las entidades financieras, ya que serían mejores las condiciones que se ofrecen desde el servicio público.
Algo similar ocurre con las compañías eléctricas. Los programas de PP, Unidas Podemos y Ciudadanos incluyen medidas que les perjudican. Los populares proponen la liberalización del sector energético y la eliminación de subvenciones. Ciudadanos busca recortar los costes asumidos a través de un mayor control de la fijación de precios; mientras que desde Unidas Podemos quieren obligar a las eléctricas a ofrecer un mínimo de luz y gas a determinados colectivos sociales.
LAS FARMACÉUTICAS SOLO SE VERÁN PERJUDICADAS SI GANA VOX
El sector farmacéutico es el que saldrá ganando sea quien sea el vencedor en los comicios del 28 de abril, a no ser que Vox sea el partido más votado o imponga parte de su programa para apoyar la investidura de otro partido. La formación encabezada por Santiago Abascal propone eliminar el acceso gratuito a la sanidad para ciertos colectivos sociales y suprimir las coberturas en algunas intervenciones médicas.
Tanto las medidas del PSOE, como de Ciudadanos y Unidas Podemos les benefician; mientras que las de PP no alterarán su situación. El programa socialista y el de Ciudadanos contemplan eliminar (PSOE) o reducir (Ciudadanos) el copago farmacéutico para ciertos colectivos sociales, lo que debería impulsar la demanda de los medicamentos genéricos. Por su parte, Podemos piensa ampliar el número de medicamentos financiados por el Estado y destinar más dinero a la investigación.
Quien más dudas tiene son las empresas petroleras, que sin duda se verían perjudicadas por una victoria socialista, con su conocido impuesto al diésel. Este sector ganaría si Albert Rivera sale elegido presidente, ya que Ciudadanos tiene intención de reducir al mínimo la dependencia energética del exterior y apostar por los recursos propios.
VOX BENEFICIA A LA DEFENSA Y A LA CONSTRUCCIÓN
El programa económico de Vox beneficia claramente a dos sectores. Por un lado, a la Defensa, ya que contempla un incremento significativo en el presupuesto para esta parcela. Además, la idea del partido de Abascal es ampliar la participación de España en misiones para reducir la amenaza yihadista.
Una de las propuestas estrella del programa de Vox es la liberación del suelo, que conllevaría un aumento significativo del espacio urbanizable en muchas ciudades. Con esta medida, constructoras como ACS, FCC o OHL incrementarán su cifra de negocio.
