El partido de extrema derecha Agrupación Nacional (RN, por sus siglas en francés) ha ganado la primera vuelta de las elecciones legislativas celebradas en Francia este domingo, y lo ha hecho logrando cerca del 30% de los votos, y junto a sus aliados de la Unión de la Extrema Derecha (UXD), alcanza el 33,15%, un resultado histórico. La coalición de izquierdas Nuevo Frente Popular ha quedado en segundo lugar, con el 27,99% de los apoyos, mientras que el bloque centrista del presidente Emmanuel Macron se ha tenido que conformar con la tercera plaza al lograr entre un 20,4% de los votos, según las encuestas. Sin embargo, aún habrá que esperar a la segunda vuelta, que se celebra el próximo domingo 7 de julio, para tener unos resultados claros. Los expertos ya avisan: "Aún está todo por decidir".
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Así lo afirma Kathleen Brooks, directora de investigación de XTB, en un comentario de mercado este lunes, en el que destaca que "muchos de los 577 distritos franceses pasarán a una segunda vuelta el próximo domingo, lo que sugiere que pocos candidatos superaron la marca del 50% necesaria para erradicar esta segunda vuelta electoral".
Además, el posicionamiento que han adoptado tanto el socialista francés Francois Hollande como el propio Macron podría dar al traste con las aspiraciones de los de Le Pen para llegar al poder. Y es que el Partido Socialista ha pedido alianzas antes de la segunda ronda de votación del domingo, para impedir que la extrema derecha obtenga una mayoría absoluta y pueda formar gobierno.
Cabe destacar que la izquierda gala se ha presentado a estas elecciones unida bajo la coalición de izquierdas Nuevo Frente Popular (NFP), que ha quedado segunda en esta primera ronda, y que engloba a los partidos Francia Insumisa (LFI), al Partido Socialista, a los comunistas y a los ecologistas.
De hecho, el líder de Francia Insumisa (LFI), Jean-Luc Mélenchon, ha anunciado que la coalición de izquierdas retirará las candidaturas allí donde han quedado en tercer lugar para evitar una división de votos. "En todas las circunstancias nuestra consigna es clara: ni un voto de más para el RN, ni un escaño de más para el RN".
Y Macron también ha pedido una gran asociación "demócrata y republicana" frente a la ultraderecha. Tal y como ha remarcado, desde su partido Ensemble optarán por la misma medida en favor del bloque de izquierdas. "Frente a la Agrupación Nacional es hora de una amplia unión claramente democrática y republicana para la segunda vuelta", ha declarado el presidente galo en un comunicado a la agencia AFP.
"El partido de Le Pen ha obtenido el mayor porcentaje de votos, pero todavía le falta la mayoría general", destaca Brooks, que cree que el hecho de que el partido centrista de Macron haya puesto sobre la mesa la posibilidad de "hacerse a un lado y dejar paso a la alianza popular de izquierda para impedir que Le Pen gane el poder" es "un avance favorable al mercado".
Además, comenta la experta de XTB, eso hace que la segunda vuelta "sea más difícil para Le Pen", ya que NFP ha quedado en segundo lugar, detrás de la Agrupación Nacional de Le Pen, por lo que junto con los votos del partido de Macron la alianza de izquierda "tendría una oportunidad creíble contra RN".
"Tendremos que ver si esta campaña electoral de los centristas y de la izquierda realmente les coloca en una posición fuerte", señala Brooks, que recuerda que de acuerdo con los datos de la votación de este domingo la extrema derecha podría ganar entre 230 y 280 escaños en el Parlamento francés, con lo que no alcanzaría una mayoría absoluta y eso podría conducir a un Parlamento sin consenso. Y es que un partido necesita 289 para obtener la mayoría absoluta, ya que el total de escaños de la Asamblea Nacional es de 577.
Aunque eso, en su opinión, "sería un mejor resultado desde la perspectiva del mercado, en comparación con una victoria absoluta del RN". Y es que "al mercado le preocupa que Le Pen y compañía puedan aumentar la presión fiscal sobre Francia y adoptar políticas que incluyen reducir la edad de jubilación y adoptar una línea dura en materia de inmigración, lo que podría aumentar el actual déficit presupuestario de Francia del 5,5%".
Como cree Brooks, un Parlamento sin mayoría "podría dificultar que se haga algo en Francia" tan radical, que "es exactamente lo que les gustaría a los mercados".
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"LA TORMENTA ELECTORAL ESTÁ LEJOS DE TERMINAR"
Otros expertos también se han expresado en la misma línea. Es el caso, por ejemplo, de Ipek Ozkardeskaya, analista senior en Swissquote Bank, que dice que "la tormenta electoral francesa está lejos de terminar". Según esta experta, el rally de RN "puede no ser seguro", y es que aún tendría que lograr la mayoría absoluta en la segunda vuelta.
En Danske Bank destacan que "debido a la participación electoral récord, aproximadamente 300 distritos electorales tendrán tres candidatos en la ronda final", aunque dado que tanto Macron como el líder de izquierda Mélenchon "se han comprometido a retirar candidatos en las próximas 48 horas para derrotar a RN", los expertos del banco danés creen que "el escenario más probable es el de un Parlamento sin consenso en la Asamblea Nacional después de la segunda vuelta".
"El resultado más probable es que ningún partido consiga una mayoría absoluta", remarcan estos analistas, y recuerdan que los candidatos ahora tienen 48 horas para retirarse "en lo que promete ser un período de intensas negociaciones cuyo seguimiento es crucial".
Desde Berenberg también apuntan que este escenario "no es peor de lo esperado", y es que a pesar de que la extrema derecha ha ganado la primera vuelta de las elecciones parlamentarias francesas, "el resultado de la segunda vuelta del 7 de julio y la medida en que RN puede influir en la política interna francesa siguen estando muy abiertos".
"Un Parlamento sin mayoría sigue siendo el resultado más probable", opinan los estrategas de la firma alemana, y señalan que "si bien es posible que RN todavía obtenga la mayoría absoluta de escaños en la segunda vuelta, esto ahora parece incluso un poco menos probable que antes", teniendo en cuenta que el recuento de votos del partido de Le Pen ha quedado aproximadamente 2 puntos por debajo de lo que habían proyectado las encuestas.