• La gran mayoría de sus miembros carecen de experiencia en el sector público...
  • ...pero tienen una trayectoria más que acreditada en el sector privado
pence investitura

Bienvenidos a Estados Unidos S.A. La compañía más importante del mundo, que posee 18 billones de dólares de capital. Su control está en las manos de 320 millones de socios, los cuales decidieron el pasado 8 de noviembre dar un giro de 180º a la empresa, con la elección de su nuevo CEO, Donald Trump.

Este mediático magnate llega a las oficinas principales de la compañía, la Casa Blanca, ante la incertidumbre de la opinión pública mundial pero con la calurosa acogida que le están ofreciendo las bolsas mundiales. El mandato de Trump, de momento de cuatro años, será vigilado con lupa por todo el mercado y, sobre todo, por la desconfianza que existe fuera de la empresa en su capacidad de gestión.

Pese a su carrera de éxito empresarial, Donald Trump gestionará por primera vez una 'compañía' del sector público. La más grande de todo el planeta, de hecho. Por ello, las personas que ha elegido para acompañarle en esta aventura se convierten en otro punto de atención. Un equipo que destaca, como define José María Marco, profesor de Relaciones Internacionales y experto en política norteamericana Comillas de ICAI-ICADE, “por que todos tienen mucha personalidad, su visión pragmática y su alergia a la ideología”.

También es seguro que este nuevo equipo tiene en común gran poderío económico. Este 'Consejo de Administración' se convertirá en el más rico de la historia, ya que a los 4.500 millones de dólares del presidente hay que sumar los más de 11.000 millones de dólares del resto del equipo.

Mike Pence. Vicepresidente. La mano derecha del presidente le aportará experiencia en el terreno político. Este republicano ha sido miembro de la Cámara de Representantes de 2001 a 2013 y, Gobernador del estado de Indiana en los últimos tres años.

Un buen consejero para el 'inexperto' nuevo líder de la compañía. Pence comparte con su jefe la característica de 'showman', no obstante, desde un punto de vista más moderado y que agrada mucho más a los socios más conservadores. Su trayectoria en el sector le ha complicado el levantamiento de una gran fortuna, al contrario que su jefe y muchos de sus compañeros de la mesa del Consejo de Administración. El Centro para para una Política Responsable (CRP, por sus siglas en ingles) calcula que acumula 211.000 dólares.

Donald Trump junto a Mike Pence

Rex W. Tillerson. Secretario de Estado. Hasta ahora presidente ejecutivo de la petrolera estadounidense Exxon Mobil, una labor que le ha llevado a amasar una fortuna que ronda los 218 millones de dólares en acciones de la empresa, además de una pensión con un valor de casi 70 millones dólares.

Tillerson ocupó en 2015 el puesto 25º entre las personas más influyentes del mundo, según Forbes. No obstante, no posee ninguna experiencia gubernamental, al igual que su nuevo jefe, pero se presenta como un elemento fundamental para trazar puentes con Rusia, un competidor histórico de EEUU que todo indica que será un aliado clave para Trump. Y Tillerson mantiene una excelente relación con Vladimir Putin.

Rex Tillerson

Andy Puzder. Secretario de Trabajo. Consejero delegado del grupo de restaurantes de comida rápida CKE, cadenas de hamburgueserías y burritos con más de 3.000 locales en el mundo, su fortuna asciende a 1.160 millones de dólares, según Forbes.

Puzder es conocido por su férrea oposición a la subida del salario mínimo y se suma a este especial Consejo de Administración después de haber asesorado económicamente a Trump en su campaña.

Andy Puzder

John Kelly. Secretario de seguridad nacional. Destacan sus 40 años como parte de la tropa de marina, el general Kelly también lideró a las tropas estadounidenses en combate en Irak, y en 2010 perdió a su hijo en combate en Afganistán.

Él será el encargado de gestionar las polémicas decisiones como el control de la inmigración indocumentada y la construcción del muro fronterizo. “Trump ha seleccionado a militares que aportan seriedad y que no tienen un fuerte carácter ideológico. Una elección muy característica de la empresas desde el punto de vista de la protección y la seguridad”, apunta José María Marco.

John F. Kelly

James Mattis. Secretario de Defensa. Conocido bajo los pseudónimos de 'perro loco' en el campo de batalla y también el 'monje guerrero' por su actitud reflexiva y bagaje intelectual. Mattis es un general retirado que comandó las primeras tropas que invadieron Afganistán en 2001 e Irak en 2003.

James Mattis

Ben Carson. Secretario de vivienda y planificación urbana. El único miembro afroamericano del Consejo de Administración. Este neurocirujano fue opositor de Trump en la carrera presidencial. Su misión principal será la gestión de las zonas más pobres de Estados Unidos. Su fortuna se estima en 26 millones de dólares. “Pese a su posición de médico, Carson deberá afrontar un puesto muy político”, señala Marco.

Ben Carson

Elaine Chao. Secretaria de Transporte. Otra figura del equipo que aporta experiencia en el sector, ya que formó parte del Gobierno de de George W. Bush y es además la esposa del líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell. Nacida en Taipéi, República de China, un país con la que mantiene una gran fricción su nuevo jefe.

Su futuro al frente de la secretaría la define el profesor de Relaciones Internacionales y experto en política norteamericana Comillas de ICAI-ICADE como "complicada " ya que tiene por delante "el macroproyecto en infraestructuras que plantea Trump”, y debe poner especial énfasis en la modernización del sistema de transporte del país. Se calcula que posea una fortuna de 17 millones de dólares.

Elaine L. Chao junto a Donald H. Rumsfeld

Tom Price. Secretario de Salud. También aportará otro grado de experiencia política, ya que ha sido congresista por el estado de Georgia desde 2005. En estos últimos seis años se ha convertido en uno de los mayores críticos de la reforma de salud de Obama, conocida como Obamacare y en este mandato será el encargado de llevar a cabo el plan de los republicanos para la reforma sanitaria. No obstante, esta tarea le ha permitido amasar una fortuna 14 millones de dólares.

Tom Price

Steven Mnuchin. Secretario de Tesoro. Fueinversor y ejecutivo del banco Goldman Sachs y director financiero de la campaña del magnate republicano el pasado abril. Su fortuna se estima en 655 millones de dólares.

Mnuchin tiene como objetivo hacer realidad las promesas de Trump en la campaña, en momentos en que Estados Unidos registra un crecimiento modesto y las desigualdades sociales aumentan. Como aclara Jorge Díaz Cardiel, socio director de Advice Strategic Consultant, este nombramiento “es más que una tradición que el puesto de secretario del Tesoro provenga de Goldman Sachs como sucedió con Clinton y Bush (hijo). Este es un mensaje de respeto de Trump a Wall Street”.

De izquierda a derecha: senador Chuck Grassley y Steven Mnuchin

Betsy Devos. Secretaria de Educación. Considerada la 'rebelde' del equipo por su papel de activista y es partidaria de impulsar las denominadas “charter schools”, escuelas que reciben fondos públicos pero son administradas por iniciativas privadas. No obstante, también pertenece a una acaudalada familia cuya fortuna rondaría cerca 5.100 millones, según a la revista estadounidense Forbes.

Betsy DeVos

Jeff Sessions. Secretario de Justicia. Una de las elecciones más polémicas por parte de Trump. Tiene una fuerte posición en contra de la inmigración y fue acusado por racismo en más de una ocasión.

También se ha opuesto al matrimonio homosexual, apoya la pena de muerte y ha negado el cambio climático. Sin duda alguna, será una ficha clave en la administración Trump, pues fue de los primeros políticos en apoyar su polémico muro en la frontera con México. Cuenta con una fortuna de 7,5 millones de dólares.

Jeff Sessions

Wilbur Ross. Secretario de Comercio. Un multimillonario inversor con intereses en el sector siderúrgico y minero y conocido por sus operaciones para reestructurar empresas fallidas. Su fortuna está estimada en 2.900 millones de dólares. “Ross deberá navegar la agresiva agenda dibujada por Trump en materia de comercio exterior y reedefinir la globalización”, indica Jorge Díaz Cardiel.

Wilbur Ross

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