MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de España ha condenado "enérgicamente" el atentado perpetrado este viernes contra un autobús en el que viajaban ciudadanos coptos por la provincia egipcia de Minya (centro), que se ha saldado con al menos siete muertos.
"El Gobierno traslada su hondo pésame a las autoridades y pueblo egipcios y, de manera especial, a la comunidad copta y a las víctimas y sus familias con el deseo de una pronta recuperación", ha dicho el Ministerio de Exteriores, Unión Europea y Cooperación.
"España estará siempre con Egipto en la lucha contra el terrorismo y en la irrenunciable defensa de la pacífica convivencia entre comunidades y religiones", ha agregado en su comunicado.
El grupo yihadista Estado Islámico, que ha perpetrado numerosos atentados contra la comunidad copta en el país, ha reclamado también la autoría de este ataque, según ha recogido la agencia británica de noticias Reuters.
El vehículo se dirigía al monasterio de San Samuel el Confesor cuando fue asaltado por un grupo de hombres armados no identificados. Las autoridades han lanzado una operación para intentar localizar a los atacantes.
El presidente del país, Abdelfatá al Sisi, ha expresado en un mensaje en su cuenta en la red social Facebook su "profundo pesar" por el suceso, que ha achacado a "manos traicioneras que buscan socavar la sólida fábrica de la nación".
Asimismo, ha recalcado que continuará "los esfuerzos para combatir el oscuro terrorismo y detener a los culpables". "Este ataque no debilitará la voluntad de nuestra nación en la continuación de su batalla para prevalecer y construir", ha zanjado.
El mandatario ha telefoneado además al Papa Tawadros II, líder de la Iglesia Ortodoxa Copta, para expresarle sus condolencias por el ataque, según un comunicado publicado por la Iglesia y recogido por el diario local 'Al Ahram'.
Por su parte, el fiscal general del país, Nabil Sadek, ha enviado a la zona un equipo de investigación. Fuentes de seguridad han dicho que la carretera que conecta el monasterio ha sido cerrada debido al peligro existente en la zona.
En 2017 ocurrió un ataque parecido contra un convoy de fieles que se dirigían al mismo monasterio y que acabó costando las vidas de 28 personas. Otras 22 resultaron heridas.