Las encuestas –las que son públicas y las que se filtran desde ‘el extranjero’ (Andorra)-, parecen confirmar la decantación de cuatro actores parlamentarios de semejante envergadura tras las elecciones de domingo. A una distancia relativamente escasa del PP, que sería el vencedor, PSOE, Ciudadanos y Podemos podrían quedar en un pañuelo y en cualquier orden.
Lo que significa que la mayoría de gobierno no surgirá clara y directamente sino que cualquier opción que se apunte podrá competir con otras igualmente posibles. Y que las minorías parlamentarias que acompañen a estos cuatro partidos podrían desempeñar un papel decisivo en la formación de la mayoría de gobierno que vaya a la investidura.
Lea también: Todo el proceso electoral del 20 de diciembre lo seguimos aquí en directo
El PNV se avendría a consolidar tanto una mayoría conservadora –el acuerdo PP-Ciudadanos- con la condición de que no cuestionen el concierto, como la formada por el PSOE y Ciudadanos, con idéntica condición.
Las minorías nacionalistas catalanas, “Democracia y Libertad” y ERC, difícilmente podrán desempeñar un papel porque ninguna formación estatal se contaminará con un acercamiento a ellas. Así las cosas, los actores secundarios en juego serán Izquierda Unida –que tradicionalmente no participa en pactos pero sí en pinzas- y el PNV, al que las encuestas otorgan cinco (el CIS) o seis (varias encuestas privadas) escaños. No parece que UPyD mantenga esta vez una presencia parlamentaria significativa.
El PNV, que tiene una tradición de gobierno junto al PSOE en Euskadi, tan sólo tiene un “enemigo” ideológico en el Estado que es Ciudadanos, la única formación que ha manifestado en su programa su hostilidad al sistema de concierto. El cabeza de lista del PNV por Vizcaya, Aitor Esteban, declaraba esta semana que a su formación "no le haría gracia" que en la próxima legislatura gobernara Mariano Rajoy y ha subrayado que le "inquieta bastante un esquema" de gobierno entre PP y Ciudadanos (C's).
Además, ha señalado que el líder socialista a La Moncloa, Pedro Sánchez, no ha mostrado aún si tiene "una agenda para Euskadi", y ha defendido que un triunfo del PNV el próximo domingo es "esencial" para proteger el autogobierno vasco. Pese a estas declaraciones, que son la ortodoxia jeltzale, es claro que el PNV se avendría a consolidar tanto una mayoría conservadora –el acuerdo PP-Ciudadanos- con la condición de que no cuestionen el concierto, como la formada por el PSOE y Ciudadanos, con idéntica condición.
Lo que suceda dependerá de la concreción de los resultados, pero conviene que se coloquen estos escaños nacionalistas en el cómputo de las hipótesis de gobernabilidad.
Antonio Papell
Lea también:
Lo que se juega España en las elecciones: las seis claves de Berenberg para el 20D
En Nota Electoral | Los tres gobiernos teóricos posibles que nos puede dejar el 20d
Wall Street Journal: el 20D será una prueba de fuego para las políticas de austeridad en Europa