La embajadora de Marruecos en España, Karima Benyaich, ha justificado la llegada masiva de unos 5.000 inmigrantes a Ceuta en las últimas horas porque "hay actos que tienen consecuencias y se tienen que asumir".
Con estas declaraciones, Benyaich hace referencia a la decisión del Gobierno español de tratar en un hospital de Logroño al líder del Frente Polisario, Brahim Ghali. Un hecho que para ella "no es puede admitir".
También ha analizado la actuación del Gobierno, "inusual" por la rapidez con la que ha sido convocada por Exteriores y ha señalado que no descarta que su Gobierno la llame a consultas en las próximas horas.
Sin embargo, desde el Gobierno evitan criticar a Marruecos y hablan en todo momento de crisis migratoria, una crisis que atribuyen a diversas circunstancias. Tanto Marlaska como Montero descartan que la acogida del líder del Polisario sea el motivo principal.
Entonces, ¿en que motivos se escuda el Gobierno? "Son circunstancias muy complejas", ha sostenido Marlaska, mencionando las de tipo socioeconómico, la propia pandemia así como las situaciones humanitarias en terceros países.
PEDRO SÁNCHEZ CANCELA SU AGENDA
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha cancelado el viaje que tenía previsto a París ante la llegada masiva de inmigrantes y ha asegurado que será "firme ante cualquier circunstancia" y que se "reestablecerá el orden" en la frontera de Ceuta y Melilla "con la mayor celeridad".
"Vamos a restablecer el orden en nuestras fronteras", "la integridad territorial de España, sus fronteras y la seguridad de nuestros compatriotas, serán defendidos por el Gobierno de España en todo momento y ante cualquier desafío, con todos los medios necesarios y conjuntamente con nuestros socios europeos", ha afirmado Sánchez durante la declaración institucional tras la rueda de prensa del Consejo de Ministros.
