El Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 1 de Castilla y León ha estimado este miércoles el recurso de Iñaki Urdangarin, preso en la cárcel de Brieva, en Ávila, y le ha concedido el tercer grado penitenciario. De este modo, Urdangarín trabajará fuera de prisión, regresará al Centro de Inserción Social Melchor Rodríguez García, en Alcalá de Henares (Madrid) para dormir de lunes a jueves y podrá disfrutar de todos los fines de semana.
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Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León han informado este miércoles sobre la resolución judicial de Urdangarin, quien ingresó en prisión el 18 de junio de 2018 para cumplir una condena de cinco años y diez meses de cárcel por delitos de corrupción en el caso Nóos.
La decisión, que puede ser recurrida y no es de aplicación inmediata, llega tres semanas después de que la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias acordase aplicar a Urdangarín el artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario, el cual permitía al marido de la infanta Cristina disfrutar de un régimen de vida penitenciario similar al tercer grado. Para ello, éste deberá seguir un plan de ejecución de lo que le resta de la pena elaborado por Prisiones y que, junto con salidas diarias para ir a trabajar, incluirá su participación en el nuevo programa de reinserción de delincuentes económicos (PIDECO) que Interior pone en marcha este enero.
Prisiones tomó aquella decisión después de que la junta de tratamiento de la prisión de Brieva hubiera propuesto ir un poco más allá y conceder a Urdangarin el tercer grado o régimen abierto, lo que le hubiera permitido solo tener que ir a dormir de lunes a jueves, con todos los fines de semana en libertad.
Urdangarin ya estuvo el pasado verano a punto de disfrutar del régimen de semilibertad. Entonces, la junta de tratamiento de Brieva ya propuso la concesión de tercer grado al marido de la infanta, pero Instituciones Penitenciarias lo rechazó y acordó aplicarle el artículo 100.2. Esa medida fue ratificada por el juez de vigilancia penitenciaria en un auto en el que apuntó que Urdangarin será excarcelado “como muy tarde” el 1 de mayo de 2022. Ese día el cuñado de Felipe VI cumplirá dos terceras partes de su condena y podrá solicitar la libertad condicional adelantada, contemplada en el artículo 90.2 del Código Penal.
Sin embargo, esta flexibilización del régimen de vida nunca se llegó a materializar, porque la fiscalía recurrió ante la Audiencia de Palma y ésta la revocó. El tribunal valoró que Urdangarin aún no había cumplido la mitad de la condena y que existían otras variables, entre ellas “la alarma social, la comisión de un delito que exige un elevado grado de planificación y el tiempo que le queda para cumplir la condena”, que no lo hacía recomendable.
