La coordinadora impide que el comité electoral celebre una rueda de prensa en la sede de En Marea
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 18 (EUROPA PRESS)
El comité electoral de las primarias de En Marea, con mayoría del sector crítico, ha denunciado un "boicot" del que culpan a personas afines a la dirección del partido instrumental que encabeza Luís Villares, a la que acusan de querer retrasar 'sine die' la celebración de las elecciones internas, que debían celebrarse hace más de dos semanas y para las que todavía no hay fecha.
Cuatro miembros del comité --Sonia Mauriz, Martiño Ramos, Jennifer Merino y Carlos Franco-- han ofrecido declaraciones a los medios en la tarde de este martes a las puertas de la sede de En Marea en Santiago, ya que, según han relatado, la coordinadora del partido instrumental no les ha autorizado a celebrar la rueda de prensa en el interior del local, algo que ya sucedió el pasado viernes con un miembro de la Comisión de Garantías.
Allí, Mauriz ha asegurado que este martes uno de sus compañeros en el comité electoral (Daniel Conde, afín a Villares) acató de manera "unilateral" la orden de suspensión dictada por Garantías sobre las tres personas acusadas de acceder de manera irregular al censo del partido. Acto seguido, según esta versión, agregó a los tres suplentes de la lista al comité al canal de mensajería Telegram que emplea el comité electoral para reunirse de manera telemática y realizar votaciones.
Con la inclusión de los tres suplentes (afines a la dirección de Villares) el número de personas que participan en este grupo se eleva a 16, tres más de los establecidos por el reglamento del comité electoral. Por lo tanto, los miembros del comité críticos con la dirección consideran que este canal de interlocución interna queda invalidado y las funciones del comité en suspenso hasta que el Comité de Garantías "solvente la situación".
Según la versión expresada por Mauriz, con los tres suplentes incluidos en el grupo, se realizó una votación "ilegal" que acordaba anunciar la dimisión de los miembros cesados por Garantías, así como suspender la rueda de prensa convocada por el comité para la tarde de este martes. Horas antes de la convocatoria, el correo electrónico oficial del comité remitía a los medios un comunicado que anunciaba las decisiones adoptadas.
Este mensaje fue desmentido minutos después por varios miembros del comité, que aseguraban que la convocatoria a los medios seguían en pie. Además, acusan a los responsables de esta acción de "suplantar" la identidad de las tres personas sobre las que pesan la petición de cese, ya que "en ningún momento" aceptaron dimitir de su cargo.
De hecho, la inclusión de las tres personas en el grupo de Telegram ha sido puesta en conocimiento de la Guardia Civil a través del sistema de consultas que la Benemérita tiene habilitado en Internet. Fuentes cercanas al comité electoral han señalado a Europa Press que no se trata de una denuncia, sino de una consulta para conocer si esa acción ha podido vulnerar los derechos de las personas participantes en el grupo, ya que al ser agregados al canal, estas personas pueden leer las conversaciones mantenidas con anterioridad a su inclusión.
DESOYEN A GARANTÍAS
Martiño Ramos, una de las personas apuntadas como responsables de acceder ilegalmente al censo, ha asegurado ante los medios que consideran que la Comisión de Garantías no está capacitada para suspender o cesar a un miembro del comité electoral, y que esta decisión debería realizarse a través de un proceso de revocación de cargo, lo que, según los estatutos de En Marea, conllevaría la convocatoria de un plenario.
Por lo tanto, estas tres personas --Martiño Ramos, Pablo Nieves y Raquel Bernández-- desoyen la resolución de Garantías. Esgrimen que, además de no ser el órgano con competencia para suspenderlos, no cometieron ninguna irregularidad, ya que actuaron en "cumplimiento" del reglamento de las primarias que los autoriza a "acceder al censo constantemente y de manera normalizada", como, dicen, ocurrió en otros procesos internos, como las primarias para las listas de las elecciones autonómicas de 2016.
"La Comisión de Garantías pretende modificar la composición del comité electoral en una vulneración más de los acuerdos del plenario que está siendo violentado para modificar la composición que las inscritas decidieron", ha señalado Sonia Mauriz, encargada de leer un comunicado del comité electoral en el que critican que la dirección "está vertiendo acusaciones muy graves en los medios sobre tres personas que están viendo vulnerado su derecho a la defensa".
LAS PRIMARAS SIGUEN EN EL AIRE
Tras dos semanas de fuego cruzado entre críticos y dirección, las primarias que debían renovar los órganos de dirección de En Marea continúan sin fecha. Cuestionados sobre si creen, como ya han expresado varias voces del sector crítico, que la dirección del partido busca retrasar deliberadamente las votaciones, los miembros del comité electoral se suman a esta versión.
Así, tras recalcar que no existían ni existen motivos para suspender las primarias, afirman que las votaciones podrían haberse reanudado el pasado fin de semana y que no fue así por voluntad de la coordinadora. Además, dicen haber conocido por la prensa las medidas acordadas por el Consello das Mareas para aumentar la seguridad del proceso, que incluyen cambiar las empresas que gestionan tanto el censo como las votaciones telemáticas aduciendo "pérdida de confianza" en estas compañías.
De este modo, el comité electoral no podrá fijar fecha para las primarias hasta que la coordinadora contrate estas nuevas empresas para que, de este modo, la Comisión de Garantías pueda levantar la suspensión que pesa sobre las primarias. Según fuentes cercanas a la dirección del partido consultadas por Europa Press, la designación de las nuevas empresas gestoras está encaminada, lo que podría hacer que en los próximos días se levanten los reparos a la celebración del proceso de elecciones internas.
Con todo, lo vivido en las últimas semanas en el partido instrumental ha acabado por distanciar definitivamente a los dos sectores que rivalizan por el control de En Marea desde hace dos años y que presentaban sendas candidaturas a este proceso de primarias.
De hecho, voces de ambos bandos reconocen que la convivencia en la misma organización entre los afines a Villares y el sector crítico (integrado por Podemos, EU, Anova y las mareas de Santiago, A Coruña y Ferrol) se torna imposible, lo que también podría afectar al Grupo Parlamentario, donde Luís Villares cuenta con el respaldo de tres de sus 13 compañeros en el Pazo do Hórreo.