- Las conversaciones con Puigdemont tampoco han gustado dentro del partido
- El equipo de Sánchez habría tomado decisiones sin consultar al resto del partido
- Las conversaciones telefónicas entre Sánchez y la presidenta andaluza han vuelto a ser tensas
La decisión de Pedro Sánchez de ceder cuatro senadores para que ERC y Democràcia i Llibertat, así como la conversación del Secretario General con el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, sobre su compromiso de abordar una reforma de la Constitución hacia un Estado federal ha enfurecido de nuevo a los barones del PSOE, que esperan llegar al comité federal del 30 de enero.
Tal y como informa El Confidencial, Susana Díaz, jefa de la Junta de Andalucía ha estado en contacto con el resto de barones del PSOE y comparte las valoraciones que sí han hecho públicas los presidentes Guillermo Fernández Vara o Javier Lambán, que consideran la concesión a los independentistas como “inexplicable” e "indeseable”.
Los del equipo de Sánchez creen que se aprovecha cualquier excusa para desgastar al Segretario General
Desde Ferraz se apresuraron a comentar que la concesión de senadores era "cortesía parlamentaria", una "práctica habitual" en las Cortes que no implicaba ninguna "negociación" para la gobernabilidad. Sin embargo, pese a estas aclaraciones el equipo de Sánchez cree que cualquier cosa es una "excusa" para "desgastar" al secretario general.
SILENCIO 'POR PRUDENCIA Y DISCRECIÓN'
Desde Andalucía, Mario Jiménez, hombre de confianza de Susana Díaz ha declarado: “No tenemos nada que decir a ese respecto. Esa es una decisión que ha tomado la dirección del grupo y la dirección del partido a nivel federal y no tenemos nada que decir ni vamos a hacer ningún tipo de valoraciones”. Además insistió en que la decisión la había tomado la dirección del grupo del Senado y el partido a nivel federal y ellos no iban a entrar en comentarios al respecto. Por tanto, el mensaje era claro, la decisión había sido unilateral de Ferraz, no la habían compartido con las federaciones, explican desde El Confidencial.
La cesión de cuatro senadores a los nacionalistas molestó a las federaciones críticas, que se quejaron por "falta de información"
La cesión de cuatro senadores a los nacionalistas en el Senado removió el PSOE, molestó profundamente a las federaciones críticas, que se quejaron por "falta de información" permanente. En Andalucía no se sabía y eso que el número dos, Juan Cornejo, es senador.
TENSIÓN CRECIENTE ENTRE DÍAZ Y SÁNCHEZ
Desde el equipo de Sánchez no niegan esta desinformación al partido. Aseguran, como expone El Confidencial, que no hay que retransmitir cada paso en un contexto que requiere grandes dosis de prudencia y discreción. Admiten además que la desconfianza preside las relaciones y recuerdan que Díaz no radió cada paso en Madrid de las negociaciones de su Gobierno en Andalucía. Las conversaciones telefónicas entre Sánchez y la presidenta han vuelto a ser tensas y además cuentan que el secretario general ha dejado muy claro a la baronesa que piensa adoptar sus propias decisiones y actuar dentro de un margen legítimo sin rendir cuentas.
Díaz no piensa declarar nada hasta el momento. Su estrategia es intentar llegar al comité federal del 30 de enero, advierten desde el entorno de la presidenta a El Confidencial. No obstante, a este ritmo de presión interna no se sabe si resistirá hasta esa fecha. A la presidenta le empiezan a dejar muy claro sus valedores del partido que tiene que decidirse y debe dar un paso en firme ya para despejar su futuro político.
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