Un antiguo empleado de la joyería Jean Pierre, en Argentina, ha declarado que la presidenta Cristina Fernández, compró allí joyas por valor de 2,5 millones de euros. Supuestamente, se trató sobre todo de collares de perlas.
Según cuenta el exempleado “María Gabriela Guerrero Martineiz le llevaba los catálogos (a la presidenta) y (ella) elegía”, tras lo cual Guerrero iba al local y retiraba las piezas escogidas para entregárselas “al jefe de seguridad de la Presidencia, Oscar Garín”.
Como publica el diario El Mundo, la “fiebre joyera” de la jefa de Estado comenzó tras enviudar en 2010, como revela el ex representante Sergio Hovaghimian.
Larevista Noticias ha contrastado los datos difundidos con fotos hechas a la presidenta y parece ser que este costoso gusto es real, ya que ha aparecido en numerosas ocasiones luciendo alhajas de marcas caras como relojes Rolex o Bulgari.
Hovaghimian ha declarado también que, tras enfrentarse a su antiguo jefe, Enrique Stad, en un juicio laboral "se metieron dos tipos en mi casa, me pegaron, me ataron, me 'gatillaron' en la cabeza y me dijeron que no me meta con Enrique (Stad) ni con la joyería".
Añade que ahora es parte del programa de testigos protegidos "no puedo salir de mi casa. Siguieron amenazándome por la calle. Es una pesadilla de todos los días. No quiero que me maten".Lea además:
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