El último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), elaborado antes de la fallida investidura de Pedro Sánchez, trae buenas noticias para el PSOE. Los socialistas se disparan en julio hasta el 41,3% de la intención de voto, cifra récord, con lo que arrasarían en caso de nuevas elecciones. Este escenario, de hecho, no se descarta tras lo ocurrido hace unos días en el Congreso de los Diputados.
El PP de Pablo Casado sigue como segunda fuerza, ya que según la encuesta lograría el 13,7% de los votos, pero Unidas Podemos logra situarse en el tercer puesto. Los de Pablo Iglesias sumarían un 13,1% de los apoyos en caso de una nueva cita en las urnas, mientras que Ciudadanos, la formación que lidera Albert Rivera, cae desde la segunda plaza cosechada en junio a la cuarta, ya que tendría que conformarse con un 12,3%. Por su parte, Vox lograría un 4,6% de los votos.
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Iglesias se despacha contra Sánchez en 'Fort Apache': "No tiene proyecto de país"Las cifras son distintas de las obtenidas por las fuerzas políticas hace un mes. De hecho, en el barómetro de junio el PSOE sumaba un 39,5% de los votos, casi dos puntos menos que ahora. Pero hay que recordar que entonces ya se había disparado respecto a los apoyos logrados en las últimas elecciones generales, las celebradas el pasado 28 de abril, en la que los socialistas obtuvieron el 28,68% de los votos. Por su parte, el PP se mantiene igual, sin cambios, y Cs baja desde el 15,8% de junio al dato actual, es decir, 3,5 puntos menos. Podemos sube cuatro décimas desde el 12,7% de junio, aunque la formación de Santiago Abascal pierde apoyos, al pasar del 5,1% al 4,6% actual.
Aunque lo más destacable de todo es que todos los partidos, menos el PSOE, se desangran respecto a los datos de las últimas elecciones. Los socialistas, según el CIS, mejorarían con creces los resultados del 28-A, pero el resto no. El PP obtuvo un 16,7% de los votos el pasado mes de abril, mientras que Cs se alzó como tercera fuerza con el 15,9%. Unidas Podemos logró el 14,3% y Vox, el 10,3%.
El sondeo recoge intención directa de voto, es decir, sin tratamiento posterior de los datos brutos, lo que se denominaba como 'cocina'. Ahora plasma directamente el conocido como 'voto directo', es decir, el porcentaje de apoyo que recibiría cada partido sobre el voto emitido.
Según ha explicado el CIS, las encuestas para este barómetro se realizaron durante los primeros días de julio, coincidiendo con las negociaciones para la investidura de Pedro Sánchez, pero antes de que se frustrara por la falta de acuerdo entre PSOE y Unidas Podemos. Aunque entonces ya se evidenciaban las dificultades para llegar a un punto de entendimiento, que quedaron constatadas con el fracaso del candidato socialista en su intento por convertirse en presidente del Gobierno.
EN BUSCA DE LA ABSTENCIÓN
Precisamente, el escenario de la repetición electoral sigue presente (el plazo para formar nuevo gobierno acaba el 23 de septiembre y, si no se consigue, los comicios se celebrarán el 10 de noviembre), aunque los expertos esperan que no haya una nueva cita en las urnas y que los partidos sean capaces de entenderse, en uno u otro sentido, para desbloquear de una vez la situación política.
De hecho, los resultados de este barómetro pueden entenderse como un toque de atención a la derecha, sobre todo a PP y Cs, que se arriesgan a perder muchos apoyos si hay nuevas elecciones. Su abstención, que Pedro Sánchez pidió encarecidamente antes y durante el debate de investidura, podría ser la clave para que arranque la nueva legislatura, si PSOE y Unidas Podemos siguen sin entenderse.
De hecho, la postura adoptada por la formación naranja, que ha provocado la marcha de algunos dirigentes como Toni Roldán a finales de junio o la reciente salida de Francisco de la Torre, ya le ha pasado factura en esta encuesta, a la que la oposición resta valor al considerar que está 'manipulada' por la mano del presidente del CIS, José Félix Tezanos. Sea como sea, los llamamientos a que PP y Cs cambien su postura para facilitar un Ejecutivo de Pedro Sánchez son constantes. El último, de Fianancial Times, que ha reclamado a Rivera y los suyos "repensarse" su veto al socialista.
LOS PARTIDOS CATALANES SUBEN
En el barómetro destaca, además, la subida de ERC. La formación, que tendió la mano absteniéndose para intentar facilitar la investidura de Sánchez y que pidió insistentemente que PSOE y Podemos se entendiesen porque el escenario de septiembre era peor (será entonces cuando se conozca la sentencia del juicio del 'procés'), sube en la encuesta. En concreto, los independentistas de Esquerra Republicana lograrían ahora un 4,5% de los apoyos, frente al 3,9% que le daba el sondeo de junio. JxCat, por su parte, pasa del 1,2% del mes pasado al 1,6% actual. Esta formación votó 'no' a Sánchez.