Cientos de manifestantes han tomado por la fuerza el Parlamento de Hong Kong para protestar contra la polémica ley de extradición a China, que ya desató disturbios a mediados de junio. Entonces, consiguieron que la ley fuese suspendida, pero no anulada, por lo que miles de jóvenes han decidido volver a salir a la calle e incrementar el volumen de las protestas, mientras sus conciudadanos de mayor edad realizaban una marcha pacífica.
Los manifestantes han conseguido entrar en las dependencias del Consejo Legislativo pasadas las 21:00 hora local (14:00 hora española) tras derribar la puerta. Por el momento, han manifestado su intención de seguir ocupando el edificio y varios de ellos se encuentran reunidos en asamblea para decidir las acciones que llevarán a cabo en las próximas horas, según informa la Agencia EFE.
Las fuerzas policiales se encontraban dentro del parlamento durante las cuatro horas que han pasado los jóvenes intentando destrozar las puertas y ventanas blindadas que dan acceso al Parlamento. Para ello, han utilizado barras de acero, ladrillos y piedras. En las inmediaciones del reciento no había presencia policial, ya que no estaba previsto que la manifestación transcurriese por la zona.
Finalmente, han conseguido entrar al edificio, donde han continuado con los destrozos, realizando pintadas con insultos en distintas dependencias y rompiendo los cristales, taquillas y pantallas. Algunos manifestantes se han marchado, mientras que otros han construido una barricada en las puertas de acceso con vallas metálicas, en previsión de un enfrentamiento con la policía, que ya ha advertido que usará "la fuerza necesaria" para desalojar el Parlamento.