El exvicesecretario de Comunicación del PP y candidato a presidir el PP, Pablo Casado, no ha desvelado este sábado quién será su secretario general en el partido si gana el XIX Congreso del partido porque quiere una "integración real y al máximo nivel" con la candidatura de Soraya Sáenz de Santamaría. Eso sí, ha avanzado los nombres de su Comité Ejecutivo Nacional, en los que figuran exministros que apoyaron a María Dolores de Cospedal, como Dolors Montserrat, Isabel García-Tejerina, Rafael Catala y Juan Ignacio Zoido.
Así se ha pronunciado ante los 3.082 compromisarios que votarán en estas horas al sucesor de Mariano Rajoy, en un encendido discurso interrumpido en numerosas ocasiones al grito de 'presidente, presidente' en el que ha reivindicado la legitimidad de los compromisarios para elegir al presidente y ha apelado a los principios clásicos del partido.
Casado no ha avanzado quién será su 'número dos' en el PP si sale victorioso porque quiere "integrar" al equipo de su "compañera" Santamaría, después de haber sumado a cuatro candidaturas que fueron derrotadas en primera vuelta y que aglutinan "el 64% de los apoyos": las de María Dolores de Cospedal, José Manuel García-Margallo, José Ramón García-Hernández y Elio Cabanes.
Según ha subrayado, Margallo, García-Hernández y Cabanes formarán parte de su Comité Ejecutivo como vocales de libre designación. En el caso de María Dolores de Cospedal, es presidenta del PP de Castilla-La Mancha y, por lo tanto, miembro nato de ese órgano, pero ha dicho que si dejara de serlo tendrá la puerta abierta para estar en su equipo.
VARIOS GALLEGOS, COMO EL 'NÚMERO DOS' DE FEIJÓO
Casado ha apostado en su Comité Ejecutivo por varios exministros que apoyaron a Cospedal en primera vuelta y ahora la han dado su respaldo, como Montserrat, Catalá, Tejerina y Zoido. También le acompañarán si gana los vicesecretarios del PP Javier Maroto y Andrea Levy; y diputados como el murciano Teodoro García-Egea que han trabajado en su campaña.
También estarán en ese Comité Ejecutivo varios gallegos como el 'número dos' de Alberto Núñez Feijóo, Alfonso Rueda, el presidente del PP de Coruña, Diego Calvo, y la diputada gallega Ana Belén Vázquez. Además, integrarán su equipo el alcalde de León, Antonio Silván; la exalcaldesa de Ciudad Real Rosa Romero; el alcalde de Boadilla del Monte, Antonio González-Querol y el consejero madrileño Carlos Izquierdo, entre otros.
REIVINDICACIÓN DE PRINCIPIOS CLÁSICOS
El candidato a la Presidencia del PP, Pablo Casado, ha reivindicado este sábado la "legitimidad" de los compromisarios para elegir al sucesor de Mariano Rajoy al frente del partido y ha realizado una reivindicación de los principios clásicos del PP, como la vida, la familia, la unidad de España o la lucha contra el terrorismo.
En su discurso ante los más de 3.000 compromisarios reunidos en el hotel Marriot Auditorium de Madrid, Casado ha defendido la necesidad de brindarles la oportunidad de elegir a su próximo líder igual que los militantes pudieron votar en la primera vuelta. "Los militantes votaron sabiendo que era una selección previa para un Congreso. A lo mejor no hubieran votado lo mismo en otro caso", ha insistido ante la insistencia de Santamaría de haber unido candidaturas para evitar la elección en las urnas.
Eso sí, Casado ha asegurado que trabajará la lograr una integración "real" tras el Congreso si resulta elegido y ha reivindicado el legado con el que llega hasta este punto, con un trabajo como vicesecretario de Comunicación durante años difíciles, yendo "a los platós a los que nadie quería ir y dando las ruedas de prensa que nadie quería ir".
Casado ha proclamado los principios que a su juicio debe enarbolar el PP para recuperar la confianza de los ciudadanos, tales como la vida, la familia, la unidad de España o la lucha contra el terrorismo. "Me presento para enarbolar los principios que nos han dado sentido, para reivindicar los valores que son nuestra columna vertebral, volver a las ideas que nos han convertido en una fuerza política imparable", ha enfatizado logrando levantar en varias ocasiones una ola de aplausos del público.