Un bombardeo de un hospital en la ciudad de Gaza ha causado la muerte de cientos de personas y ha intensificado el conflicto entre Israel y Palestina. Al menos 500 palestinos han muerto, según las autoridades.
Ambas partes se culpan mutuamente. Palestina acusa a Israel, mientras que Israel afirma que el hospital ha sido alcanzado en un intento de ataque con misiles por parte del grupo militante Yihad Islámica, con base en Gaza. La Yihad Islámica, sin embargo, ha manifestado que Israel miente cuando les acusa a ellos. Según el grupo, Israel había ordenado evacuar el hospital bajo amenaza de bombardeo, y fue una bomba lanzada por un avión israelí la que causó la tragedia.
De confirmarse la autoría israelí, lo ocurrido en el hospital gazatí sería una de las mayores matanzas jamás causada por un bombardeo de su ejército.
La campaña de bombardeos aéreos de Israel sobre la Franja de Gaza forma parte de lo que ellos llaman un cerco total, que incluye la interrupción de suministros de agua, alimentos y electricidad a la población.
El presidente de EEUU, Joe Biden, ha viajado a Israel en las últimas horas, tal y como tenía previsto, con las tensiones 'a flor de piel' tras lo ocurrido. Culpando a Israel de lo que calificaron de atentado, los dirigentes de Jordania, Egipto y la Autoridad Palestina han cancelado una cumbre con Biden fijada para hoy en Ammán. En varias ciudades importantes de la región han estallado protestas contra Israel.
El primer ministro, Benjamin Netanyahu, ha declarado que los aviones israelíes no han atacado el hospital y ha culpado también a la Yihad Islámica. Turquía se ha unido a los países que han condenado el ataque y responsabilizan a Israel del mismo. El Pentágono ha dicho que no tiene información inmediata sobre quién ha sido el responsable.
Este ataque se produce en el marco de la guerra desatada entre Israel y Palestina después de que, el pasado 7 de octubre, Hamás perpetrara un ataque terrorista en Israel que causó la muerte de al menos 1.000 personas. El Gobierno israelí afirma que Hamás aún mantiene secuestrados al menos a 199 rehenes tomados en Israel.
Los líderes mundiales están intensificando sus esfuerzos diplomáticos para evitar una escalada de la guerra ante el temor de que Irán y otros aliados de Hamás puedan verse implicados, y también para permitir que la ayuda humanitaria llegue a Gaza.