El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, celebró este domingo el 245º cumpleaños de la nación abriendo las puertas de la Casa Blanca y pidiendo a los estadounidenses que pongan de su parte para acabar con la pandemia de Covid-19 de una vez por todas.
Biden quería llegar al 4 de julio logrando la "independencia" del virus y con el 70% de la población vacunada, pero finalmente, según datos del Centro para el Control de la Prevención de Enfermedades, no se ha alcanzado este nivel, con un 67% de la población inoculada actualmente. Algunas personas, especialmente los jóvenes, se han resistido a vacunarse, lo que ha suscitado la preocupación de las autoridades sanitarias, ya que la variante Delta, más agresiva, amenaza con provocar otra oleada de la pandemia.
"Este año, el 4 de julio es un día de celebración especial porque estamos saliendo de la oscuridad de un año de pandemia y aislamiento, un año de dolor, miedo y pérdidas desgarradoras", dijo Biden en una fiesta en la Casa Blanca, que abrió sus puertas a unas 1.000 personas, entre las que se encontraban familias de militares y trabajadores implicados en la respuesta al Covid-19, informa Reuters. "No queremos volver a estar donde estábamos hoy hace un año", añadió.
Biden lamentó la muerte de las personas, elogió a los estadounidenses que ayudaron en la respuesta de emergencia del país y dijo que las vacunas son la mejor defensa contra las nuevas variantes del virus.
"Es lo más patriótico que se puede hacer", afirmó sobre la vacunación.