Isabel Díaz Ayuso no se moja. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha dejado en el aire la posibilidad de que pidan oficialmente al Gobierno un toque de queda en la capital. "La salud es lo primero, pero la economía no puede sufrir más", ha aseverado durante su comparecencia de este miércoles ante los medios acompañada de su vicepresidente, Ignacio Aguado.
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En este sentido, Ayuso ha señalado que se requieren medidas más "sensatas y quirúrgicas", lamentando que en el caso de que exista un toque de queda, esos encuentros sociales seguirán teniendo lugar pero en los domicilios y puede no ser la mejor estrategia para hacer frente a la pandemia.
"El 80% de los contagios se dan en el ámbito privado", ha subrayado Ayuso, que ha añadido que el mayor número de casos se está dando en la franja que va desde los 15 a los 29 años.
La presidenta de la Comunidad se ha referido así a la posibilidad del toque de queda mencionada por su consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, que pedía un control "más exhaustivo" desde las 0:00 hasta las 6:00 horas para "restringir la movilidad y la concentración".
Aguado ha apuntado que "los focos (de contagio) no están en el transporte público, como dicen algunos, sino en reuniones sociales". El vicepresidente de la Comunidad añade que "cuando llegamos a casa es cuando más probabilidades hay de contagiar".
"La movilidad nocturna es otro factor", ha reconocido Aguado, que también ha señalado acusadoramente al colectivo de "los jóvenes", segmento de la población que acumula un 30% de los contagios en la capital española.
