Argentina vive este domingo un momento de cambio político. Las elecciones presidenciales se han convertido en una de las decisiones más relevantes de la historia reciente del país. Destaca que por vez primera en más de una década no habrá ningún candidato que pertenezca a la familia Kirchner. Argentina vota este domingo a la espera de que se resuelva la incertidumbre. Scioli y Macri son los principales favoritos a lograr la victoria.
Estas elecciones presidenciales quedan casi huérfanas por la imposibilidad de Cristina Fernández de Kirchner de revalidar el cargo para otros cuatro años debido a la prohibición constitucional de enlazar más de dos mandatos consecutivos. Ya intentó impulsar una de la Carta Magna para perpetuar el 'kirchnerismo', pero la fuerte crítica opositora la hizo desechar esta idea.
La líder izquierdista estaba así ante una difícil decisión que afectaría al futuro político de la ideología que su familia ha contribuido a forjar durante 12 años: encontrar un digno sucesor que sea fiel al 'kirchnerismo'. Se llegó a barajar que su hijo Máximo, líder de las juventudes de La Cámpora, ocupase su lugar como candidato. También se terminó descartando al polémico y joven ministro de Economía, Axel Kicillof, por sus malos resultados.
La balanza se decantó finalmente por el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, porque, a pesar de su escaso 'feeling' personal con Fernández de Kirchner, era el único en condiciones de garantizar la victoria del oficialismo.
SCIOLI, LA GRAN ESPERANZA DEL FRENTE
Scioli se ha convertido en la gran esperanza del Frente para la Victoria (FpV) para mantenerse en el poder y, a juzgar por los sondeos sobre intención de voto, podría conseguirlo, pero paradójicamente podría ser también su peor enemigo. La clave es el perfil moderado que ha acuñado en su dilatada carrera política, que incluso llegó a desesperar al ex presidente Néstor Kirchner, que le nombró jefe de Gabinete.
En la oposición, los únicos candidatos presidenciales con posibilidades reales de alcanzar la Jefatura de Estado son Mauricio Macri, que encabeza la coalición Cambiemos, y Sergio Massa, de Unidos por una Nueva Alternativa (UNE). El aspirante de Cambiemos tiene también como plataforma la ciudad de Buenos Aires, de la que ha sido alcalde los últimos ocho años.
El contrapeso de Macri en estos comicios es Massa, un oficialista arrepentido que se ha presentado como el único capaz de acabar con Fernández de Kirchner porque conoce sus debilidades mejor que nadie.
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