SEVILLA, 4 (EUROPA PRESS)
Las secretaria general del PSOE-A y presidenta de la Junta en funciones, Susana Díaz, ha manifestado este martes que sólo se presentará a la investidura ante el Pleno del Parlamento si cuenta con los "apoyos suficientes" para ser reelegida como jefa del Ejecutivo andaluz y ha expresado que cuenta con el respaldo del secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para tratar de evitar que el Gobierno autonómico quede en manos "de la extrema derecha".
En declaraciones a la Cadena Ser recogidas por Europa Press, Susana Díaz, que ha señalado que en absoluto puede estar contenta con el resultado que el PSOE-A obtuvo en las elecciones autonómicas del pasado domingo, ha querido dejar claro que si hubiera perdido esos comicios, se habría ido a su casa y nadie se lo habría tenido que pedir, pero su partido fue el más votado y tuvo el respaldo de más de un millón de andaluces.
Ha manifestado que ha hablado con Pedro Sánchez, quien tuvo un tono "cariñoso", diciendo que "ahí lo tenía para lo que hiciera falta y para intentar evitar que la extrema derecha entrara en las instituciones en Andalucía". "Que hablábamos lo que fuera necesario para ayudar; la verdad, que muy bien", ha apuntado Díaz sobre su conversación con Sánchez.
En este sentido, preguntada sobre las manifestaciones del secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, llamando a la regeneración del partido en Andalucía y si ello podría suponer su salida como secretaria general, Susana Díaz ha considerado que esas manifestaciones se han podido "sacar de contexto por los periodistas y seguramente no es lo que ha querido decir".
Asimismo, la presidenta en funciones ha querido dejar claro que "se regenera aquello que está degenerado" y que ella está al frente de un partido "decente, honesto, trabajador y que se deja la piel por los andaluces". "Si yo hubiera perdido las elecciones, me habría ido ya y no me lo habrían tenido ni que pedir ni me hubiera refugiado en el voto de nadie", ha indicado Susana Díaz, para quien "gobernar no es ganar, sino que ganar es ganar".
Susana Díaz ha indicado que también ha recibido el cariño de muchos compañeros del partido en el resto de España, como Ximo Puig, Javier Lambán, Javier Fernández o de José Manuel Franco. Preguntada sobre si se trata de un grupo de "aliados frente a Ferraz", ha querido dejar claro que "en absoluto", porque ella está exclusivamente centrada en Andalucía y no quiere saber de "historias del partido".
Sobre la posibilidad de presentarse a la investidura, ha señalado que para eso está trabajando, porque ha ganado las elecciones y su "responsabilidad" es hablar con el resto de fuerzas políticas, menos con un partido de extrema derecha como es Vox, que no cree en la autonomía de Andalucía.
"Ahora quiero saber dónde están los constitucionalistas y aquellos que venían no a repartirse sillones, sino a contribuir a hacer una democracia más fuerte", ha indicado Susana Díaz en referencia a PP-A y Ciudadanos (Cs), apuntando que tenemos una "responsabilidad" en esta tierra de no dejar "el Gobierno en manos de la extrema derecha".
Susana Díaz, que se ha mostrado segura de que no se equivocó adelantando unos tres meses las elecciones, ha manifestado que ahora viene la parte de la política, de que en función de la representación, todos tenemos que hablar con todos. "Aquí estaba contento quien ha perdido más porcentaje de votos que yo y solo porque ya echaba números con la extrema derecha", según ha indicado Susana Díaz en referencia al presidente del PP-A y candidato a la Junta, Juanma Moreno.
En cuanto al hecho de que el canditado de Ciudadanos (Cs) a la Presidencia de la Junta, Juan Marín, pida el apoyo de PSOE-A y PP-A para ser investido, Susana Díaz ha preguntado "por qué tiene derecho el que ha quedado tercero a decir que le voten" y ella, que ha ganado los comicios, no tiene derecho. "¿Acaso el voto del millón de personas que han votado al PSOE-A es de peor calidad que el de que ha quedado tercero?", ha preguntado.
Ha manifestado que si Gobierno andaluz quedara finalmente en manos de la derecha sería una "mala noticia porque sería apoyado en la extrema derecha". Preguntada sobre si se quedaría como líder de la oposición en el Parlamento, ha señalado que ella espera quedarse como presidenta y que en Andalucía no tengamos un "pacto de perdedores" con PP-A, Cs y la extrema derecha "tóxica" que es VOX.
Al final, según ha agregado, todos los que denunciaban "pactos de perdedores" en España, son los que ahora quieren hacer aquí un "tripartito con la extrema derecha tóxica para la autonomía y la igualdad".