- La alcaldesa de la Ciudad Condal tolera la 'okupación' de cuatro fincas de propiedad municipal
- Podrían ser desalojadas si el consistorio decidiera solicitarlo ante el juez
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, quiere evitar nuevos disturbios como los acontecidos esta semana en el barrio de Gràcia, por lo que ha decidido permitir, al menos por el momento, las 'okupaciones' que se mantienen en cuatro fincas de propiedad municipal. No obstante, llegado el momento y si así lo decide, el Ayuntamiento podría proceder al desalojo previa solicitud ante el juez.
Entre las fincas que están 'okupadas' se encuentra Can Vies, uno de los casos que más polémica ha suscitado
Según recoge El Mundo, Colau no quiere que la violencia antisistema empañe el primer aniversario de su llegada al consistorio de la Ciudad Condal, por lo que ha permitido que sigan varas 'okupaciones' con el objetivo de evitar nuevos altercados como los que se han producido a lo largo de toda la semana en Gràcia. Entre las fincas que están 'okupadas' se encuentra Can Vies, uno de los casos que más polémica ha suscitado.
Lea también: Vídeo | La violencia se desata por el paseo de Gràcia en Barcelona
Los okupas se encuentran en el centro social de Sants que el exalcalde Xavier Trias intentó desalojar en mayo de 2014. Tras varias noches de disturbios, Trias aceptó que volvieran al edificio y siguieran en él hasta diciembre de 2016,aunque puso una condición: que los okupas pidieran una licencia municipal de obras para reconstruirlo. Sin embargo, no se ha cumplido. Pese a ello, Colau ha permitido que sigan allí e incluso se ha mostrado dispuesta a negociar para evitar que el centro okupa por excelencia pase a la historia. En concreto, dijo que pretendía "hacer compatible la preservación de Can Vies y la construcción de la pasarela" que cubrirá las vías de la estación de Sants,es decir, que está abierta a redefinir el proyecto urbanístico.
Y Colau se mantiene en esta postura pese a que el PSC, su nuevo socio en el Ejecutivo municipal, quiere ver Can Vies demolido. "Si entramos en el Gobierno, lo primero que propondremos es que se derribe Can Vies", dijo en marzo el edil socialista y nuevo concejal de políticas urbanísticas del Ayuntamiento, Daniel Mòdol.
Lea también: ¿Guerra urbana en Barcelona? Nuevos disturbios y bronca entre los partidos
LAS OTRAS FINCAS OKUPADAS
Además de Can Vies, el consistorio está permitiendo la 'okupación' de otros tres edificios de su propiedad que tendrían que acoger equipamientos, según su calificación urbanística. Se trata de la casa okupa bautizada como Hort de la Vila, en el distrito de Sarrià, que fue comprada por el Ayuntamiento para instalar un centro cultural.Lleva en esta situación desde diciembre, y ahora el Gobierno municipal negocia con los activistas para ceder el control del mismo a través de "fórmulas innovadoras de gestión comunitaria".
En la misma situación se encuentran otras tres fincas, que debían convertirse en equipamientos públicos
Y en la misma situación están una finca en el barrio de Sant Andreu, concretamente en la calle Segre 1, unas antiguas viviendas que deberían reconvertirse en zonas verdes y equipamientos, pero que, desde el pasado mes de enero también están okupadas.; y la situada en el centro de Barcelona, en el distrito de Ciutat Vella. Esta última era una antigua escuela de adultos que también tendría que acabar convertida en un equipamiento municipal.
Lea también: Batalla entre los Mossos y los 'okupas': Un detenido y 15 heridos en Barcelona
¿QUÉ HA PASADO EN EL BARRIO DE GRÀCIA?
Los okupas se han rebelado al ser desalojados de una sucursal bancaria en el barrio de Gràcia
Contenedores en llamas, desorden callejero, violencia injustificada... Barcelona ha vivido esta semana un brote de violencia 'okupa'. Un estallido antisistema que se produce con gobernantes municipales, como es el caso de los ediles de la CUP, que se han mostrado cómplices y cercanos, aunque no directamente integrantes, del colectivo "squatter" barcelonés. Además, la actuación de la alcaldesa de la ciudad catalana, Ada Colau, ha sido muy criticada ante lo que es calificado ya de 'guerra urbana'.
En concreto, ha habido tres noches consecutivas de disturbios en el barrio de Gràcia, que se salraron con varios detenidos y decenas de heridos, entre ellos varios agentes de los Mossos d'Esquadra. Las protestas se iniciaron cuando un banco okupado fue desalojado, algo que no fue una sorpresa teniendo en cuenta que el ayuntamiento de Colau anunció hace meses que en enero dejaría de pagar el alquiler al propietario del inmueble tras descubrir que Trias le abonó 66.500 euros públicos para que renunciara a la expulsión de los okupas.
Lee además:
Cargas policiales en la movilización del barrio de Grácia
Nuevos altercados entre la policía y los manifestantes en el barrio barcelonés de Gràcia