- Los expertos explican que los vehículos diésel adaptados ya a la normativa vigente han reducido las emisiones y el problema es el parqué antiguo de coches
- Algunos países están acelerando el ocaso de los combustibles fósiles en general, como Noruega, Alemania, Francia u Holanda
- Las tecnologías alternativas van copando poco a poco el mercado y son el futuro a medio y largo plazo

El diésel ya no es lo que era. Y, sobre todo parece que no será lo que estaba llamado a ser. El gasóleo llegó a convertirse en el carburante más utilizado entre los usuarios de automóviles por ser más barato que la gasolina. Además, entre otras cosas, los coches con motor diésel poseían una conducibilidad a bajas vueltas más agradable que los que utilizan el combustible estrella y la autonomía por litro era mayor. Sin embargo, las ventas ahora se resienten y saltan las alarmas por su emisión de gases contaminantes, algo que ha hecho que se tomen medidas drásticas desde la Unión Europea.