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Elon Musk ha aprovechado la presentación de resultados trimestrales de Tesla como altavoz para pedir "la liberación de América" ante un confinamiento que califica de "fascismo".
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Así se ha expresado el consejero delegado de la fabricante de coches eléctricos al ser preguntado por los analistas sobre la liquidez de su empresa en tiempos del coronavirus.
La orden de obligar a la gente a permanecer en sus casas es, a sus ojos, "un encarcelamiento forzoso que va en contra de sus derechos constitucionales". Musk se ha mostrado preocupado de que esto acabe afectando a Tesla de aquí en adelante. Al fin y al cabo, buena parte de su producción depende de su fábrica en Fremont, California.
Los planes de Tesla pasaron, en un primer momento, por mantener la planta abierta pese a las recomendaciones de permanecer en casa lanzadas por el Gobierno de EEUU. Finalmente, los de Musk tuvieron que aceptar el cierre temporal al no ser considerado un negocio esencial y, por tanto, permitirle seguir abierto en plena crisis.
Seis ciudades californianas han alargado sus medidas de confinamiento hasta, al menos, finales de mayo. Entre ellos se incluye Alameda, lugar en el que se encuentra la fábrica de la compañía. Musk ha finalizado la presentación de los históricos resultados de Tesla con una pregunta: ¿Es correcto ir en contra de los derechos de los ciudadanos con todo lo que está pasando ahora?"
