Lo digital se impone en todos los procesos y la compra de un vehículo nuevo o de segunda mano no iba a ser menos. De hecho, el 80% de los pasos en el proceso de compra de un coche ya es digital, siendo la consulta a familiares y amigos y la interacción directa con el concesionario prácticamente el único momento analógico.
Si se repasan los pasos que todo consumidor da a la hora de adquirir un automóvil, la primera fase es aquella en la que se busca información previa. En ella, el futuro cliente echa mano de buscadores online, páginas web de concesionarios o redes sociales, además de la consulta correspondiente a las personas del entorno. Tras esto, se empieza a prestar atención a los anuncios, ya sean online, en televisión o en prensa.
Una vez decidido el modelo que se quiere comprar, el consumidor pasa a buscar la manera en la que personalizarlo
Una vez que se tiene decidido el modelo de coche que se quiere comprar, el consumidor pasa a buscar la manera en la que personalizarlo, a calcular el préstamo necesario, se leen críticas de profesionales especializados y se busca y ubica el concesionario, todo ello es parte de un proceso casi enteramente digital.
Una vez que ya se ha procedido a la compra del coche, un paso para lo que sí que ha tenido que haber interacción directa, y antes de que se haga efectiva la entrega de las llaves, el usuario vuelve a conectarse para hacer las últimas consultas.
Precisamente una compañía que utiliza completamente el canal online para que los consumidores puedan estrenar su vehículo es Carfy.es. Se trata de una plataforma que, con más de medio millón de usuarios, consigue proporcionar un ahorro medio de 4.500 euros. Su funcionamiento es muy sencillo: en apenas 24 horas encuentra para sus usuarios las mejores ofertas del panorama automovilístico y, además, totalmente gratis.
