Su director financiero abandona el cargo y la empresa anuncia una ampliación de capital de 590 millones de euros
MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
Aston Martin Lagonda obtuvo una pérdidas de 104,4 millones de libras (123 millones de euros) en el último ejercicio, lo que supone una caída del 83% respecto a 2018, como consecuencia de la caída de las ventas y el impacto de la menor financiación a clientes y establecimientos comerciales.
Según informó el fabricante británico de automóviles deportivos, los ingresos fueron de 997,3 millones de libras (1.173 millones de euros) en este periodo, tras registrar un descenso del 9%, la misma caída que en el volumen de vehículos vendidos, que descendió hasta las 5.862 unidades.
Al retroceso de las ventas se une también la mayor depreciación y amortización experimentada en el último año y el incremento de los costes de publicidad, junto con una provisión de 19 millones de libras (22 millones de euros) relacionada con la deuda relativa a la venta de propiedad intelectual.
A raíz de estos resultados, la compañía ha anunciado que reiniciará su modelo de negocio durante este año, con el propósito de gestionar la inversión en el medio plazo, mejorar la generación de caja y poder operar finalmente como "una verdadera marca de coches de lujo".
IMPACTO DEL CORONAVIRUS
No obstante, en el camino se encontrará con una serie de obstáculos como la caída de las ventas en coches deportivos esperada para 2020 o la incertidumbre que rodea al avance del coronavirus Covid-19, admitiendo que podrá tener un potencial impacto en la cadena de suministro procedente de China, así como en la demanda por parte del gigante asiático, cuyas ventas representan el 9% del total.
De forma paralela, el grupo anunció que su director financiero y consejero ejecutivo, Mark Wilson, abandonará su cargo antes del próximo 30 de abril tras mutuo acuerdo entre ambas partes, aunque continuará en la compañía para ayudar en el periodo de transición hasta junio de este año.
Asimismo, Aston Martin ha propuesto una ampliación de capital de 500 millones de libras (590 millones de euros), con el fin de mejorar la liquidez, estabilizar las cuentas y contribuir a sentar las bases para su futuro.
En esta cuantía también se tiene en cuenta la aportación de 182 millones de libras (215 millones de euros) del multimillonario canadiense y copropietario de la escudería de Fórmula 1 Racing Point Lawrence Stroll, quien se unirá al consejo de administración y será el próximo presidente ejecutivo de la compañía.