¿Tienes un Seat León o Tarraco fabricado entre 2020 y 2022? Entonces deberías llevarlo a revisión tras la alerta por riesgo de incendio de la que se ha hecho eco la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). Según explica, se ha detectado un fusible defectuoso que podría causar un cortocircuito, con el consiguiente riesgo de incendio y, por lo tanto, de accidente.
El sistema de alerta rápida de productos peligrosos no alimentarios de la Unión Europea (RAPEX) ha lanzado una alerta tras haberse detectado un fallo en un fusible de los modelos Seat Leon y Seat Tarraco fabricados entre el 18 de septiembre de 2020 y el 10 de enero de 2022, que podría terminar causando un cortocircuito.
Un problema que podría afectar a hasta 17.500 vehículos comercializados en España: 15.000 Seat Leon y 2.500 Seat Tarraco.
OCU explica que tras el aviso OCU Seat deberá ponerse en contacto con los propietarios para resolver el problema, que "deberá hacerse de forma gratuita y lo antes posible", y recuerda que aquellos que hayan adquirido el vehículo de segunda mano o hayan cambiado su domicilio habitual tendrán que ocuparse de pedir cita al fabricante para que solucione el problema cuanto antes. El código de recuperación de la empresa es el 93N9.
La organización aprovecha lo ocurrido para denunciar "la falta de controles de calidad en el proceso de fabricación de muchos fabricantes, un problema habitual en muchas marcas y que resulta muy preocupante cuando está relacionado con la seguridad del automóvil".
