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Otra sesión de volatilidad. Wall Street ha registrado subidas del 3% (Dow Jones: +3,19%; S&P 500: +3,35%; Nasdaq: +3,62%) tras cerrar una de sus semanas más alcistas de la historia (aunque el viernes cayó más del 3%). El petróleo ha sido protagonista, ya que el crudo West Texas baja un 6%, hasta 20,14 dólares, mínimos de los últimos 18 años. El otro protagonista ha sido Trump, ya que el presidente de EEUU ha extendido las restricciones por el virus hasta el próximo 30 de abril y prosigue con su errática gestión de la crisis.
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Pese a rebotar un 15% en las últimas cinco sesiones, el Dow Jones acumula una caída del 20% desde su máximo histórico de mediados de febrero. Y todo ello debido a la pandemia del COVID-19, que se ha convertido en un auténtico shock para la economía mundial y ha provocado una súbita recesión global, lo que ha originado este gran desplome de las bolsas.
Y casi en paralelo, la gran respuesta monetaria de los bancos centrales y los gobiernos para prevenir que la crisis sanitaria y el parón económico no se conviertan en una crisis financiera y crediticia ha provocado el posterior y violento rebote de las bolsas mundiales.
Los últimos datos muestran más de 153.000 casos solo en territorio estadounidense y más de 2.800 fallecidos; y se espera que la cifra de muertes llegue a su pico más alto en dos semanas. Uno de los máximos responsables en la lucha contra la enfermedad en EEUU, el epidemiólogo Anthony Fauci, ha calculado que la cifra de fallecidos en este país oscilará entre 100.000 y 200.000 personas.
A nivel empresarial, Johnson & Johnson ha identificado una posible vacuna para el Covid-19 y ha señalado que las pruebas en humanos comenzarán en septiembre. Sus acciones han subido un 8% y han liderado las ganancias en el Dow Jones.
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"Las bolsas afrontan un periodo de noticias incluso peores respecto al virus y los datos macro en los dos próximos meses", alertan los estrategas de MRB Partners. "El mundo está entrando en una tercera fase, la del colapso económico, que pondrá a prueba la confianza de los inversores", opinan.
"Nuestra tesis es que, teniendo en cuenta la velocidad de la caída, habrá rallies de alivio pero acabarán viéndose eclipsados", apuntan los expertos de JPMorgan en su último informe. "El rebote puede acabar siendo un arma táctica también", añaden.
La volatilidad sigue también instaurada en el resto de bolsas mundiales. En Europa, el Ibex ha bajado un 1,7% tras registrar España un menor crecimiento en su cifra de muertos por el virus. En Asia, los parqués han cerrado con signo mixto el inicio de semana.
En otros mercados, el euro se deprecia un 0,9% y se cambia a 1,1042 dólares y la rentabilidad del bono americano a 10 años cae hasta el 0,69%. Por su parte, el índice VIX de volatilidad cae un 12%, hasta 57 puntos.
Y por análisis técnico, el Dow Jones, ha rebotado desde la zona de soporte que supone el 50% del nivel de ajuste/retroceso de toda la subida acumuladas desde los mínimos de la última gran crisis: marzo de 2009. "Como zona de resistencia más importante tenemos el último de los grandes huecos bajistas, en los 23.185 puntos", indica José María Rodríguez, analista de Bolsamanía.
