Wall Street ha cerrado la sesión del viernes con pérdidas y en su nivel más bajo desde julio (Dow Jones: -1,07%; S&P 500: -1,07%; Nasdaq: -1,31%) después de haber comenzado la jornada con ganancias y tras la sesión mixta de este jueves, en la que Dow Jones y S&P 500 consiguieron romper una racha negativa de cuatro días.
El saldo ha sido negativo para los índices neoyorquinos por tercera semana consecutiva. El Dow Jones ha perdido un 2,99% y el S&P 500 se ha dejado un 3,29%. El Nasdaq, por su parte, ha retrocedido un 4,21% y ha registrado su racha perdedora más larga en 3 años.
Los inversores, que siguen intentando recuperarse tras el mazazo que supuso Jack Hole, han puesto el foco en la publicación de nuevos datos macroeconómicos, como las nóminas no agrícolas de agosto, cuya lectura, según los analistas, puede reafirmar la dura postura de la Reserva Federal (Fed) en la próxima reunión de septiembre.
“LA FED TIENE MARGEN PARA SEGUIR SUBIENDO”
Ha pasado casi una semana del duro discurso de Jerome Powell y la situación ha cambiado drásticamente. El mercado estaba inmerso en una espiral de optimismo después de que el mejor dato de inflación de julio insuflara esperanzas de que la Fed suavizaría su hoja de ruta… Pero no fue así. Las contundentes declaraciones de Powell borraron por completo este optimismo y las sucesivas comparecencias de diversos miembros de la Fed no han hecho más que reafirmar a su presidente: los tipos no van a bajar antes de 2024.
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La situación es "mucho más dura" en las bolsas debido a Jackson HolePor si las palabras no fueran suficientes, los datos macro de la primera economía del mundo también apuntan en esa dirección. Para Michael Hewson, analista jefe de mercados en CMC Markets UK, las últimas lecturas “solo han servido para reforzar el mensaje respecto a la determinación de la Fed de subir los tipos y mitigar cualquier preocupación que sus acciones pudieran tener sobre la economía estadounidense”.
A su vez, Juan José Fernández-Figares, director de análisis de Link Securities, apunta que las buenas cifras macro “son interpretadas en estos momentos por los inversores en clave 'negativa', ya que entienden que si la economía se muestra resistente la Reserva Federal tendrá más margen para seguir subiendo sus tasas de interés con el objetivo de 'domar' la inflación”.
Por ejemplo, las peticiones semanales de desempleo en Estados Unidos descendieron hasta las 232.000 desde las 237.000, siendo la lectura más baja desde el mes de junio. A su vez, la encuesta ISM en agosto registró una cifra principal positiva, así como una inflación más suave y componentes de empleo más fuerte.
“Incluso el informe de empleo ADP mostró que los salarios están aumentando fuertemente, a una tasa del 7,6% para los puestos existentes, lo que indica que la inflación se está integrando más en la economía en general”, afirma Hewson. La resistencia del mercado laboral de EEUU, explica este experto, ha sido una característica notable en lo que respecta a los datos macro de la primera economía del mundo en lo que llevamos de 2022.
Y es que las lecturas estadounidenses contrastan con las cifras del resto del mundo, ya que las cifras de Europa, Reino Unido y China han sido “nefastas” y, según Hewson, con “pocas perspectivas de que podamos ver una mejora tangible, en un contexto de endurecimiento de la política monetaria por parte del BCE y el Banco de Inglaterra”. “Con este telón de fondo de debilidad económica y la determinación de los bancos centrales de dar prioridad a la inflación sobre el crecimiento, el panorama es difícil para las bolsas”, afirma.
La lectura de los datos de empleo no agrícolas puede servir para seguir corroborando esta hipótesis. El mercado laboral estadounidense sigue sólido, pero ha ralentizado su ritmo durante el mes de agosto. La economía del país creó 315.000 puestos de trabajo, un dato que ha mejorado la previsión del consenso, que anticipaba 300.000, pero que supone una disminución con respecto a los 526.000 creados en julio.
La tasa de paro, por su parte, se ha incrementado en agosto hasta el 3,7%, desde el 3,5% registrado en julio, según ha publicado la Oficina de Estadísticas Laborales de EEUU. Por el contrario, la tasa de participación en el mercado laboral aumentó ligeramente al 62,4%, desde el 62,1% registrado en julio y anticipado por el consenso.
Fernández-Figares indica que las cifras por encima de las expectativas del mercado de 300.000 empleos netos podrían ser consideradas como negativas por los inversores. Por su parte, Neil Wilson, analista jefe de mercados de Markets.com, apunta en la misma dirección y afirma que una buena lectura es peor que una mala lectura, ya que puede dar alas a la Reserva Federal para seguir subiendo los tipos de interés de referencia. Por el momento, en contra de lo que cabría esperar, el mercado ha reaccionado positivamente a esta lectura. “En cualquier caso, sean cuales sean los movimientos a corto plazo, esto no se acabará hasta que la Fed diga lo contrario”, sentencia Wilson.
OTROS MERCADOS
En otros mercados, el petróleo ha repuntado tras los rumores de que la OPEP+ podría plantear reducir su producción en su reunión del próximo lunes. El West Texas se ha intercambiado por 87 dólares (+0,43%) y el Brent, por 93,11 dólares (+0,8%).
El euro se ha fortalecido frente al ‘billete verde’ y se ha intercambiado por 1,0003 dólares (+0,59%). La onza de oro ha ganado un 0,7% (1.721 dólares) y el rendimiento del bono estadounidense a diez años ha caído hasta el 3,2%.
El bitcoin ha subido un 0,44%, hasta los 19.914 dólares.