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Wall Street ha rebotado (Dow Jones: +2,17%; S&P 500: +1,23%; Nasdaq: +0,17%) tras el festivo del lunes y las ganancias del 3% de la pasada semana. Muy importante por análisis técnico, el S&P 500 ha superado durante la sesión la importante resistencia de los 3.000 puntos, pero se ha girado a la baja en el tramo final y ha cerrado en 2.991 enteros, tras un máximo intradía en 3.021. Además, el Nasdaq ha llegado a subir hasta 9.501 puntos, muy cerca de su máximo histórico de 9.838, pero ha cerrado en 9.340.
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Mientras tanto, EEUU sigue inmerso en su reapertura. La actividad económica del país se sigue recuperando conforme más y más estados vuelven a abrir sus puertas. Las aerolíneas se desmarcan con un avance del 7%, igual que las hoteleras (+9%) y otros valores que salen ganando con la vuelta a la nueva normalidad.
"El próximo mes conoceremos los resultados de los test de estrés a la banca, si el rebote del petróleo es sostenible y si podemos evitar un rebrote del virus", apuntan los analistas de Wells Fargo. "Si las cosas salen bien, esperamos una reordenación hacia sectores como las small caps, valores cíclicos e inversiones value", añaden.
A nivel económico, el Índice de Actividad de la Fed de Chicago ha bajado en abril hasta -16,74 puntos desde el -4,97 de marzo. Además, el Índice de precios de vivienda Case/Shiller subió en marzo un 3,9%, por encima del 3,4% anticipado.
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"La recuperación no tendrá forma de V, sino una U muy grande. Es decir, bajamos muy, muy bruscamente y luego, a medida que el impacto del virus comienza a pasar y la actividad regresa gradualmente, comenzamos la recuperación. No hay un repunte inmediato, sino una tendencia alcista gradual en la economía", afima Dan Fuss, gestor de fondos de Loomis Sayles.
El número de casos de coronavirus en EEUU supera ya los 1,6 millones de contagios y las muertes ascienden hasta las 97.000. Precisamente, este martes se reabrirá el parqué de la bolsa neoyorquina tras permanecer dos meses cerrado. Otro foco importante para los inversores está siendo el regreso de la guerra comercial, ya que EEUU ha amenazado a Pekín con sanciones por su gestión en Hong Kong.
A nivel empresarial, la enésima candidata a tener una vacuna contra el coronavirus, Novavax, ha subido un 4% tras anunciar que ha iniciado su ensayo clínico en humanos. La semana pasada, fue la biotecnológica Moderna la que insufló esperanzas al mercado. Semanas antes, Gilead hizo lo propio.
En otros mercados, el petróleo West Texas sube un 4%, hasta 34,58 dólares, por la previsión de un repunte de la demanda a nivel global. Además, la onza de oro cae un 0,6%, hasta 1.724 dólares, mientras el euro se aprecia un 0,8% y se cambia a 1,0986 dólares. Por último, la rentabilidad del bono americano a 10 años repunta ligeramente hasta el 0,68%.
A nivel técnico, el S&P 500 tiene una importante resistencia en el "hueco bajista semanal de 2.972 puntos", zona que está actuando como resistencia desde los máximos de abril. El principal indicador mundial ha cerrado en 2.991 puntos. Superar con claridad (por encima de 3.050 puntos) esta resistencia le abriría el camino para volver a buscar su máximo histórico de febrero, en 3.393,50 puntos, pero no hacerlo puede suponer un nuevo tramo bajista a corto plazo.
