La debilidad de las economías mundial y europea, combinada con una política de tipos de interés ultra-bajos, ha aumentado la preocupación por la rentabilidad a largo plazo de los bancos. Los expertos de UBS creen que las entidades financieras se enfrentan a serios problemas y que una forma "obvia" para enfrentarlos es la consolidación, es decir, las operaciones de fusión y adquisición entre ellas. Sin embargo, al mismo tiempo reconocen que estas operaciones son complicadas y que no son la panacea a la hora de acabar con los problemas.
"En el papel, las matemáticas funcionan. Si se emplean dos minutos para fusionar dos bancos de la Zona Euro, es fácil ver una mejora en su rentabilidad y resultados. Sin embargo, las directivas de estas entidades están rechazando la petición de los organismos de llevar a cabo estas operaciones, como la de BCE. Pese a ello, incluso si hubiera facilidades para las fusiones y adquisiciones bancarias en Europa, nuestro análisis muestra que el modelo de negocio minorista transfronterizo podría ser estructuralmente menos rentable", advierten desde UBS.
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Moody's alerta: las fusiones de bancos ponen en riesgo los acuerdos de bancasegurosJean Pierre Mustier, CEO de Unicredit y actual presidente de la Federación Bancaria Europea, descarta una ola de operaciones corporativas entre prestamistas europeos durante los próximos dos años dadas las trabas existentes para ello. Las fusiones y adquisiciones no sólo requerirían un contexto externo más estable. Además, los bancos también necesitarían comprender mejor la regulación. Otros aspectos, incluida la falta de procedimientos de insolvencia comunes para los bancos de toda Europa, siguen siendo obstáculos claves para las fusiones y adquisiciones transfronterizas.
LAS ALTERNATIVAS
"La consolidación no es la única forma de mejorar la eficiencia operativa (de los bancos)", apuntan desde UBS. En su opinión, aunque las operaciones en el sector "pueden tener mucho sentido", la complejidad del negocio minorista transfronterizo puede dejar poco espacio para este tipo de operaciones.
"La integración de instituciones que antes eran independientes siempre será difícil, arriesgado y costoso, sobre todo cuando las fusiones ocurren más allá de las fronteras. Por otra parte, la unión bancaria en Europa todavía es un proceso que tardará varios años y los bancos pueden no tener el lujo de esperar para mejorar su eficiencia operativa", añaden desde UBS.
Es por ello que, desde la firma, ofrecen una serie de alternativas a las entidades para adaptarse al complicado entorno actual, como compartir plataformas al estilo de lo que están haciendo los seis mayores bancos en Escandinavia; llegar a acuerdos tecnológicas -"We.trade es un buen ejemplo", señalan desde UBS-; la consolidación del 'back office'; entrar en sociedades -el año pasado, Creval vendió su negocio de seguros, Global Assicurazioni, a Credit Agricole, y entró en una sociedad exclusiva de distribución para los próximos 15 años, apunta UBS-; y pasar a lo "puramente digital" -"los bancos también puede optar por expandirse en el extranjero de forma puramente digital, de forma similar a lo que ha hecho ING en los mercados de sus competidores o BNP Paribas en Alemania".